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Todos los juzgados de Ceuta cuentan con un reloj de control
para las entradas y salidas del personal, aunque nunca han
sido utilizados. Podrían empezar a serlo ahora, tras el
impulso que quiere dar el Ministerio de Justicia al control
de los horarios de los funcionarios. Sin embargo, se está a
la espera de los resultados de negociaciones entre el
Gobierno y los sindicatos.
El hecho de que el Ministerio de Justicia haya propuesto
introducir un control horario en el funcionariado de la
administración competente tendría repercusiones en el día a
día de los juzgados de Ceuta. El departamento gubernativo
que dirige el ministro Alberto Ruiz-Gallardón ha planteado
ya un calendario de negociaciones con los sindicatos a nivel
estatal, que tendría directa incidencia en Ceuta, puesto que
las competencias en la materia en la Ciudad Autónoma
dependen directamente de Madrid, como territorio ministerial
que es, a diferencia de otras comunidades autónomas.
La responsable de la Secretaría de Gobierno de Tribunales y
Juzgados de Ceuta, Josefa Villar, no ve excesivos problemas
en cuanto a tal control horario, puesto que existen
mecanismos para hacerlo sin dilaciones fuera de lugar.
Hay dos resoluciones ministeriales ya en marcha, como
recuerda Villar, que se refieren a los horarios de los
funcionarios judiciales y a los secretarios judiciales.
El modo de control de horario de trabajo puede hacerse de
varias maneras, bien a través de fichaje en relojes, bien
controlando digitalmente las huellas de las personas, con el
objeto de que la identidad sea plenamente verificada, así
como los horarios de entradas y salidas.
Ahora bien, “nunca”, como apunta Villar, se ha fichado en
los territorios judiciales que dependen directamente del
Ministerio de Justicia. Sin embargo, como apuntan, “lo
normal es que todos fichen, y cuando digo todos, me refiero
a todos, sin excepción”, señala tajante.
En la Secretaría General no hay más noticias, al menos
oficialmente, que las que se han venido publicando en el
Boletín Oficial de Estado (BOE), en cuanto a las citadas
órdenes ministeriales.
Las sedes judiciales ceutíes cuentan, por cierto, con
relojes para fichar, todas y cada una, aunque jamás han
entrado en funcionamiento, por lo que desde la Secretaría
General, que se ocupa de la Gerencia de la administración de
Justicia y que en definitiva es la que tendría que poner en
marcha el mecanismo de control si ello fuese necesario, no
hay excesiva preocupación por dotar de mecanismos de
control, toda vez que ya están instalados. Sólo cabría una
revisión previa de los sistemas.
En todo caso, aún no ha habido oficialmente ningún tipo de
comentario al respecto, desde las instancias gubernativas,
por lo que de momento se mantiene a la expectativa el
organismo competente, que en este caso es la Secretaría de
Gobierno de los Tribunales y Juzgados de Ceuta.
Ahora bien, la situación se complica debido a que los
mecanismos de control podrían ponerse en marcha en breve y
en estos momentos concurre la circunstancia del periodo
estival de vacaciones, con lo que supone de planificación de
turnos de plantilla. El caso se presenta aún más complejo en
torno a la función de los secretarios judiciales, quienes
también tienen derecho a sus merecidas vacaciones. De hecho,
desde la Secretaría de Gobierno hay que realizar gestiones
muy precisas, por ejemplo, en el caso de la sustitución de
un secretario general, figura judicial que tiene una gran
importancia en todos los órdenes.
“Es un verdadero laberinto”, reconoce Villar, ya que ha de
justificar sobradamente la necesidad de contar con un
secretario judicial en el caso de que por cualquier
circunstancia sea preciso. Es una de las funciones que asume
Villar, y que supone, por ejemplo, examinar también la bolsa
de trabajo de secretarios judiciales, justificar debidamente
la situación, pedir autorización, y obtenerla. Nada menos.
Pero se muestra positiva en este aspecto, teniendo en cuenta
“la época de restricciones” que se está viviendo, tanto en
lo referente a los secretarios judiciales como al
funcionariado de la administración de Justicia en General.
En todo caso, siguen observándose desproporciones en cuanto
a la adjudicación de medios de la administración de Justicia
en Ceuta, fundamentalmente en los humanos.
La Dirección General de Relaciones con la Administración de
Justicia ha convocado esta semana a los sindicatos del
sector para conversar, entre otros puntos, sobre la
distribución de la jornada y la fijación de los horarios
determinados en el calendario laboral de los secretarios
judiciales y de los funcionarios de los Cuerpos Generales o
Especiales.
Las resoluciones afectan a los funcionarios del territorio
del Ministerio de Justicia -de aquellas comunidades sin las
competencias transferidas-, así como a los secretarios
judiciales de toda España ya que este Cuerpo depende del
propio Ministerio.
Las propuestas de Justicia no se refieren a los jueces y
magistrados, ya que su regulación depende del Consejo
General del Poder Judicial (CGPJ).
Las resoluciones proponen que las Gerencias Territoriales
del Ministerio, con la colaboración de los responsables de
los centros de destino, unidades y servicios de esta
Administración, velen “en su ámbito de competencia por el
cumplimiento de las jornadas y horarios de trabajo” mediante
“el sistema de control” establecido. Se contemplan medidas
para la corrección de incumplimientos e infracciones, algo
que ya se hace en la actualidad.
Mientras que el horario de los funcionarios será controlado
por la Administración, los secretarios judiciales vigilarán
su cumplimiento ellos mismos. La propuesta del Ministerio
establece que “los secretarios coordinadores o, en su caso,
los de gobierno velarán en su ámbito de competencia por el
cumplimiento de las jornadas y horarios de trabajo”.
La regulación del calendario laboral para el Cuerpo Superior
Jurídico de Secretarios Judiciales les permite desempeñar
cuatro o cinco horas durante el horario de atención al
público en los juzgados y, el resto de la jornada, cumplirla
fuera de la oficina judicial. El Ministerio argumenta que
este colectivo ejerce funciones directivas , como la
práctica de diligencias procesales o la preparación y
estudio de resoluciones.
La secretaria general del Sector de Administración de
Justicia de CCOO, Flora Martínez, explicó que se trata de la
primera vez en la que el Ministerio establece dos
resoluciones distintas para ambos colectivos y se muestra
sorprendida porque sean los propios secretarios judiciales
los que controlen su horario, a diferencia del resto de
empleados públicos.
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