La adjudicataria del servicio de limpieza dispondrá de un
servicio telefónico de atención al ciudadano, “dado el papel
que este desempeña como usuario del servicio público”,
objeto del contrato. Así, este servicio deberá estar
operativo en horario de mañana y tarde.
De este trabajo tendrá que estar a cargo el personal
“debidamente informado, fundamentalmente en lo concerniente
a las programaciones de los diferentes servicios”. La
empresa que se haga con el servicio tendrá un libro en el
que se apuntarán todos los datos de las llamadas recibidas,
fecha y hora, consultas, quejas manifestadas o incidencias
producidas, etc., debiendo estar toda esta información a
“disposición municipal”.
Por otra parte, la entidad que resulte ganadora del concurso
estará obligada a disponer de unos servicios informáticos
“compatibles” con los del Ayuntamiento, a fin de que por
este último se tenga acceso directo e inmediato a “cuanta
información relevante del servicio se precise, muy
especialmente la relacionada a la situación del personal,
medios y desarrollo de los servicios”.
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