En la parte final de su discurso, Luz Elena Sanín aludió a
que “comenzando por la Educación -en referencia al colectivo
gitano romaní-, debemos facilitar a estos grupos los
instrumentos que les permitan romper el yugo que los
atenaza, hasta lograr su plena integración. En el seno del
Consejo de Europa debemos alzar la voz de alarma y rechazar
toda iniciativa de expulsión colectiva discriminatoria,
basada en la étnia de los gitanos romaníes, como ya ha
ocurrido en algunos países europeos. No nos dejemos atrapar
por actitudes xenófobas y apoyemos los valores de igualdad,
libertad y legalidad”.
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