Los escondites que los traficantes de droga a pequeña escala
emplean para ocultarla han dado lugar en los últimos tiempos
a algunas anécdotas. A finales del pasado año, la novedad
fueron las avionetas teledirigidas, dos de las cuales se
encontraron por la Guardia Civil con bellotas de hachís en
su interior. Al parecer, la finalidad de estos aparatos era
el transporte de pequeñas cantidades de esta sustancia desde
zonas limítrofres de Marruecos, como Beliones. La primera de
las avionetas se encontró en el mar y la segunda, el 5 de
diciembre, en la pista de La Lastra.
Por su parte, ya en 2012 y en concreto lo que va de mes, han
sido unas naranjas y un carrito de bebé otros de los
elementos utilizados para esconder droga. En ambos casos, el
hachís, encapsulado, se halló en el control de embarque de
pasajeros y equipajes de la Estación Marítima, gracias al
escáner con el que la Guardia Civil cuenta en esta zona.
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