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El sindicato UFP propuso ayer al delegado del Gobierno,
Francisco Antonio González, que se cree un módulo para
presos en el Hospital Universitario, como existe en otras
ciudades con una cárcel del tamaño de la que va a haber en
Ceuta. Este tipo de instalaciones permiten, entre otras
cosas, una mejor custodia de los internos, y garantizan la
seguridad de ellos mismos, del resto de pacientes y del
personal sanitario.
La Unión Federal de Policía (UFP) ha propuesto al delegado
del Gobierno, Francisco Antonio González, que se cree un
módulo para atender a los presos hospitalizados. La
propuesta se realizó durante la primera reunión que los
representantes de este sindicato mantuvieron con el máximo
responsable de la Delegación. A la cita acudieron el
secretario provincial de la UPF, Fernando Guerrero, y de
Organización y Finanzas, José Miguel Yugueros.
Tal como señalaron ambos al término del encuentro con el
delegado, este resultó “interesante y satisfactorio” y
además de otros asuntos de interés para el Cuerpo Nacional
de Policía se trató esta propuesta sobre el módulo
hospitalario, que tuvo -según resaltaron- muy buena acogida
por parte de González Pérez. “Le ha parecido interesante y
se ha puesto manos a la obra para que pueda llevarse a la
práctica”, indicó Guerrero.
Tal como señala el secretario general de UFP, los módulos
hospitalarios existen en todas las ciudades que tienen una
prisión de ciertas dimensiones, como la que se construye en
Fuerte Mendizábal, que dispondrá de 800 celdas. El objetivo
de este tipo de instalaciones es que el régimen
penitenciario se pueda llevar a cabo en las mejores
condiciones también en las estancias hospitalarias de los
internos.
En la actualidad, y según indican desde la UFP, hay
ocasiones en las que hasta tres presos de Los Rosales se
encuentran hospitalizados al mismo tiempo en otras tantas
habitaciones, en zonas compartidas con el resto de
pacientes. De este modo, en lugar de dos agentes para la
custodia de un solo acceso a varias habitaciones -que
constituyen un módulo hospitalario- es necesaria la
presencia de seis policías. Además, las habitaciones para
los presos han de tener las mismas condiciones de seguridad
que existen en la prisión. “Esto garantiza la intimidad de
los propios reclusos y también la seguridad de ellos mismos,
del personal sanitario y de los pacientes”, concluye
Guerrero.
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