Para el Grupo municipal Caballas, el Plan Aparca se ha
convertido “en un perfecto exponente del modo irresponsable
en el que Juan Vivas gestiona el Ayuntamiento”. En una nota
de prensa remitida ayer, la coalición recuerda que se
acometió “una obra de 24 millones de euros que,
supuestamente, se pensaba financiar mediante la venta de las
plazas de aparcamiento a los ciudadanos y a través de fondo
de compensación”. “Una vez concluida la obra (muy poco antes
de la elecciones de 2011) y con la única intención de captar
votos, se cedió el uso gratuito”, afirman.
Caballas señala que “sin explicación alguna, la operación de
venta se paralizó y el Fondo de Compensación se redujo a
menos de la mitad” y que la obra “se quedó ejecutada y sin
financiación”. “El señor Vivas aparecía ante los vecinos de
las barriadas afectadas como un magnánimo gobernante que
ponía a disposición de los vecinos unas instalaciones
magníficas gratuitas y el importe de las obras pasaba a
sumar la indecente cifra de facturas impagadas”, aseguran.
Para Caballas, “las dos últimas decisiones siguen abundando
en el despropósito”. El Plan Aparca se ha incluido en la
operación de pago a proveedores “a pesar de que parte de la
deuda no está vencida y por tanto no es susceptible de
acogerse a este plan”, lo que significa “que se pagará
mediante un crédito a abonar por todos los ceutíes durante
los próximos diez años”.
“Por último, y sin ningún cambio de circunstancias, han
decidido prohibir el uso de los aparcamientos por parte de
los vecinos, lo que significa que permanecerán cerrados sin
utilidad alguna, ya que el plan de ventas sigue paralizado”.
Finalmente, en el comunicado se afirma que “no se puede
entender cómo lo que antes era bueno, ahora se convierte en
malo” y que “la única explicación, como todo lo que hace el
Gobierno, es que faltan más de tres años para las próximas
elecciones y ahora no les preocupa para nada lo que puedan
opinar los ciudadanos”.
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