El desorden urbanístico que tradicionalmente se ha centrado
en la ciudad en las barriadas del Príncipe Felipe y Príncipe
Alfonso parece extenderse a otros lugares. Este es el caso,
al menos, el más llamativo, del Recinto Sur, una zona en la
que esta misma semana se observaron las dificultades que
servicios tan importantes como el de Bomberos tienen para
acceder a las intrincadas callejuelas en las que se han
convertido estos barrios de Ceuta a causa de la construcción
de viviendas fuera de ordenamiento. La situación se
reproduce por ejemplo, en Pasaje Recreo y algunos puntos de
República Argentina y parte de Los Rosales.
“No estamos hablando de Príncipe Felipe o Príncipe Alfonso,
pero hay muchas cosas que debemos solucionar, tenemos que
prevenir, porque si no lo hacemos se va a convertir en algo
parecido”. Quien así se expresa es el presidente de la
Asociación de Vecinos de Recinto Sur, José María Romero, a
quien EL PUEBLO ha preguntado acerca de un problema cuyo
última consecuencia se vio en el incendio intencionado del
pasado miércoles en Pasaje Recreo Alto. Allí, los bomberos
tuvieron que utilizar la única técnica que funciona en
barriadas como el Príncipe: el tendido de cientos de metros
de manguera para, desde el camión motobomba, llegar a la
vivienda que ardía.
La proliferación de construcciones ilegales en algunos
núcleos de la ciudad ha convertido los espacios públicos en
angostos callejones, a veces sin salida, que impiden el
acceso de vehículos de emergencias o de las Fuerzas y
Cuerpos de Seguridad del Estado. Pero lejos de
circunscribirse a la barriada más conocida por esta práctica
de la autoconstrucción de viviendas, sin licencia ni control
legal alguno, esta no se limita ya al Príncipe, sino que se
ha extendido, sobre todo, y como reconocen también desde el
Cuerpo de Bomberos, a la zona del Recinto Sur.
“Aquí hay una problemática grave, y es la de hacer cumplir
la ley, la ley está para todo el mundo”, afirma el
representante de la AAVV del Recinto, que ha sido además
vocal de seguridad durante 14 años (hasta hace uno) en la
Federación provincial de asociaciones de vecinos. “Nadie
tiene derecho a hacerse una casa de cinco plantas porque le
de la gana, sin ser suyo el terreno o existiendo una
ordenanza o reglamento urbanístico; aquí las leyes hay que
respetarlas, para lo bueno y para lo malo, igual que tenemos
el Estado del Bienestar, tenemos también que cumplir las
leyes”, argumenta Romero.
En opinión del presidente de la asociación vecinal, “lo
inmediato” en estos casos sería “la demolición”, porque
“todos tenemos derecho a una vivienda digna, lo dice la
Constitución, pero acatando la ley, lo que no se puede luego
es legalizar lo ilegalizable”.
Para Romero, de seguir así las cosas, el Recinto, una amplia
zona que abarca también Pasaje Recreo Alto, y las calles
Sevilla, Estrella, Tetuán, Machado, hasta el Sarchal, y la
calle Real, y donde calcula viven unas 3.500 o 4.000
personas, “va a ser un desmadre, incontrolable como lo es
Príncipe Felipe o Príncipe Alfonso”. Romero explica que son
“calles de muy difícil accesibilidad, es muy complicado
entrar aquí, si viniera la policía, no podría, aunque
quisiera, patrullar, ni en coche ni en moto, tendría que
hacerlo a pie, no habría otra opción”. “Es un problema de
seguridad ciudadana tremendo, y si no ponemos puertas al
campo, esto, esta zona en concreto, se va a salir de madre,
y después vendrán las lamentaciones, querremos poner parches
cuando la solución hay que ponerla ahora, no dentro de diez
años, cuando no la haya”, concluye.
Respecto a las múltiples ocasiones “cientos, la última, hace
seis meses”, en las que los representantes vecinales se han
reunido con responsables políticos para hablar de este
asunto, Romero es también tajante: “Esto no tiene solución,
no se la están dando o porque no quieren, o porque no saben
o porque quieren mirar para otro lado, pero por supuesto que
tiene solución, hay ordenanzas municipales, hay un
reglamento de seguridad ciudadana, tiene que haber presencia
policial en las barriadas, no la ‘Operación Guadiana’, que
es una obligación, debería ser una obligación; nosotros
demandamos otra cosa y no nos hacen ni caso”.
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Los Bomberos necesitan la guía de los vecinos para llegar a
zonas del Príncipe o el Recinto
El jefe del Servicio de Extinción
de Incendios y Emergencias (SEIS), Manuel Gentil, señala que
barriadas como las del Príncipe, en las que es “difícil
acceder” con los vehículos de extinción de incendios
“existen en otras ciudades”, y cita como ejemplo (aunque no
lo es a causa de la construcción ilegal), del histórico
barrio sevillano de Santa Cruz. En el caso de Ceuta,
dificultades de ese tipo se encuentran, admite Gentil, en
zonas como pasaje Recreo (donde se quemó una vivienda esta
misma semana), y por supuesto el Príncipe, “con sitios y
callejones” que no permiten la entrada de los vehículos y
hay que hacer “un tendido de manguera para llegar al lugar
del incendio”. “Pero claro, son muchos callejones y tiene
que haber gente por ahí que nos indique, porque no son
sitios conocidos y como no haya personas que nos guíen nos
perdemos”, agrega el jefe de Bomberos, quien con esta
puntualización indica otro de los problemas de los servicios
de emergencias y seguridad para moverse por estos lugares.
Hay otras zonas, como la cuesta Parisiana donde también se
dan estas dificultades, pero tienen “menos viviendas”,
subraya.
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