El Parlamento Europeo y lo que allí se cuece afecta al día a
día de los ciudadanos. Así argumentaron los
europarlamentarios la importancia de conocer el papel de la
institución. Luego desgranaron sus respuestas sobre los
asuntos más variados, desvelando el intenso debate que se
vive en Bruselas en asuntos sobre la crisis y los fondos
estructurales o la falta de impulso a una educación
homogeneizada.
Los 17 hombres y 8 mujeres que compusieron el Foro Ciudadano
de Ceuta hicieron 25 preguntas, en las que predominaron las
cuestiones económicas vinculadas a la peculiar situación de
Ceuta dentro de la UE, pero fronteriza con Marruecos y los
asuntos sociales.
Así, los ciudadanos formularon 7 cuestiones económicas y
otras 7 sobre asuntos sociales. Las inquietudes expuestas
por Manuel Doncel, vicepresidente de la Cámara de Comercio,
y Diego Sastre, de Procesa, sobre la aportación de fondos
estructurales de la UE a la ciudad fueron relevantes.
Salvador Garriga, del PP, explicó que “ojalá no haya
recortes” por la crisis y reveló que ahora mismo se debate
una nueva distribución de los fondos porque “los estados no
quieren seguir aportando lo que aportaban antes”.
Iraxte García trasladó tranquilidad al recordar que Ceuta y
Melilla tienen 50 millones de euros “para hacer frente a su
especificidad”.
El apartado de salarios de los funcionarios y condiciones
laborales, algo que preocupa a la gran mayoría de la
población fue planteado por las organizaciones sindicales
CC.OO, UGT y CSIF. El mensaje que llega de Europa es que los
recortes a los empleados de la administración se han
producido en varios países por los planes de ajuste y hay
estrategias en marcha de apoyo a las pymes, los
microcréditos y nuevas fórmulas a explorar para crear
empleo. Sobre la convergencia de las condiciones laborales,
Garriga manifestó que “en esta legislatura se quiere
homogeneizar las condiciones laborales. Afecta a la
competitividad y 23 millones de parados exigen una respuesta
común”.
Las dos preguntas relacionadas con la Educación fueron dos,
tuvieron respuestas muy gráficas de los europarlamentarios.
El informe PISA sobre el bajo nivel educativo de la
enseñanza española y el malestar general tuvo respuestas
claras y contundentes. “Todo el mundo (se refería en el
Parlamento Europeo) se queja de sus sistema educativo y
homogeneizar los sistemas educativos, es un triunfo”.
Iraxte García abogó por “el intercambio de las buenas
prácticas de los diferentes sistemas educativos” y desveló
que la educación “no está en la agenda política” de los
líderes europeos y auguró que “quizás en unos años estará”.
Las cuestiones sociales que salieron a la luz fueron
variadas, ya que abarcaron la minoría gitana, los
discapacitados, los menores con Síndorme de Down, los
jóvenes y el Año del Voluntariado.
Salvador Garriga trasladó a la representante de los
discapacitados la “gran labor” que el CERMI hace en Europa.
Sobre Violencia de Género quedó patente que España ha ido
por delante con la Ley de Protección Integral y que la orden
de protección ha sido debatida en el Parlamento Europeo “y
tiene el apoyo unánime de todos los países, aunque algunos
no lo ven en los mismos términos”, dijo Iratxe García.
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¿Adolece de falta de un organismo para políticas fiscales la
UE?
La pregunta de Rafael Moreno
Ávalos apuntó al corazón económico europeo al plantear la
necesidad de un organismo que coordine las políticas
fiscales y económicas. La respuesta de Salvador Garriga, del
PP, fue decir que “hemos sido ingenuos creyendo que el Plan
de Estabilidad era suficiente. Nadie esperaba al crear el
euro que vendría una crisis y habría una reacción tan
distinta de los estados”.El eurodiputado aclaró que “todos
los presupuestos generales de los estados europeos son
examinados ahora por la UE”. Garriga dijo que “si llegamos a
armonizar los sistemas fiscales, estaríamos dando un paso
superior en la integración y sería una pieza clave en la
competitividad”.
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