La Subinspección General Sur del Ejército (SUIGESUR) con
sede en Sevilla, órgano que ya controla, dirige las
actividades relativas a la seguridad de las Bases,
acuartelamientos y establecimientos, así como la dirección,
gestión, administración y control de las actividades
relativas a la infraestructura y protección medioambiental
de las Bases, acuartelamientos y establecimientos del
Ejército de Tierra, no ha respondido totalmente a las
cuestiones planteadas por EL PUEBLO en relación al papel que
desempeñará, en la nueva estructura, la figura del
Comandante General y de la propia Comandancia General en la
nueva Base Única Discontinua, cuyo término novedoso se ha
acuñado para el caso de Ceuta contrariamente a lo que se
presuponía en función de lo proyectado.
Un General comanda una unidad militar más grande que un
regimiento, como puede ser una brigada, una división o un
ejército. Actualmente el Comandante General es un General de
División, pero existen dudas muy ciertas de que hoy en día
Ceuta alcance el nivel de una Brigada. Si acaso, sería una
Brigada muy reducida.
Contrariamente a lo que estiman militares de alto rango
ahora en la reserva y analistas de Inteligencia militar, las
plazas de Ceuta y Melilla dejarán de ser autosuficientes con
el Plan de Transición aprobado en 2008, lo que supondría una
merma en su capacidad de reacción ante cualquier adversidad.
El CESEDEN recordaba en su análisis hace sólo tres meses que
“Ceuta y Melilla constituyen los puntos más sensibles para
la integridad del país”. La relevancia de ambas ciudades,
desde el punto de vista estratégico militar estriba, según
el informe ‘Hacia una estrategia de Seguridad Nacional para
España’ en que son “una misión constitucional y un objetivo
estratégico” por la ubicación geográfica donde se encuentran
y las cuestiones de su entorno.
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