Los tres nuevos plantes de Protección Civil van a ser
trasladados a Madrid el próximo día 17 para exponerlos ante
la Comisión Nacional. Estos documentos, que tratan sobre las
inundaciones, los incendios forestales y de emergencia
exterior ATLAS. El técnico Alejandro Vargas explicó a EL
PUEBLO las diferencias y las características de cada uno de
estos planes.
Los tres nuevos planes de Protección Civil de la ciudad van
a ser trasladados a Madrid el próximo día 17 a la Comisión
Nacional en la cual, los representantes de la Ciudad harán
“una exposición para defender estos proyectos para que sean
homologados a nivel estatal”, explica el técnico Alejandro
Vargas. Y es que, el trabajo de estudio que se ha llevado a
cabo por todas las zonas de Ceuta ha sido ejemplar. Los
planes, el de inundaciones -INUNCE-, el de incendios
forestales -INFOCE- y el exterior de la empresa ATLAS,
proporcionarán datos y puntos más importantes a seguir en el
caso de alguna catástrofe.
El objetivo principal de estos planes es “articular” los
servicios de emergencia para que, en el caso de catástrofe,
“puedan crecer de manera rápida”. Cada uno de estos
documentos incluyen, sobre todo el de incendios e
inundaciones, “un análisis extenso del territorio”. Así, en
cuanto a incendios forestales se refiere, las “zonas
peligrosas serían la comprendida entre Calamocarro y el
Renegado. Se ha analizado la orografía, la forma en la que
podría dar el viento y se ha analizado por supuesto el
interés ecológico que tiene la zona”, explica el técnico de
Protección Civil. “En la actualidad los retenes habituales
forestales se encuentran ya apoyados continuamente por los
zetas de la Policía Local-.
Desde el punto de vista de las inundaciones, las cuencas
analizas que “más peligrosidad tendrían en períodos de
retorno entre 50 y 100 años, es decir, a muy largo plazo,
serían las del arroyo de Benítez y el arroyo de Benzú”,
continúa Vargas. Sin embargo, también destacó que “las
cuencas, los arroyos y las cañadas de Ceuta no suelen ser
peligrosos, aunque estas zonas sean más susceptibles”. Y es
que se han llevado a cabo un “buen número” de cálculos
matemáticos que han realizado diferentes especialistas.
Sirve también para extrapolarlo a los distinto servicio para
que lo tengan en cuenta a la hora de hacer, por ejemplo, una
regulación urbanística.
Niveles de emergencia
Los niveles de emergencia se dividen en tres. En el número 1
participaría “la institución automómica a través de los
servicios municipales habilitados”, argumenta Vargas. Si la
emergencia va subiendo de nivel, ya se comienzan a “contar
con empresas municipales”. En el número 2 se contaría “con
determinados servicios del Estado”, como es el caso de
Policía Nacional o Guardia Civil. Y por último, en el nivel
3, “el máximo”, se recurriría a recursos de la península y
militares.
En la situación conocida como “catástrofe” sería el Estado
el que tomaría el mando de “forma exclusiva. Por ejemplo, si
hay dos comunidades autónomas implicadas. Tendría que ser
algo muy grande. Otro ejemplo sería un terremoto con muchos
fallecidos o un gran accidente industrial”. En España, desde
que la normativa europea de Protección Civil entrara en
vigor hace 25 años, en 1985, no se ha tenido que activar
ningún nivel de emergencia 3, ni siquiera durante “los
famosos incendios que se produjeron en Galicia”. Y es que,
según destacó el técnico de Protección Civil, en Ceuta tan
sólo ha habido dos activaciones. Una ocurrió en el año 2008
cuando se dio el nivel 2. “En aquel momento se solicitaron
diferentes recursos del Estado, como fue el caso de la
Unidad Militar de Emergencia o UME”. La última activación
tuvo lugar el año pasado, aunque sólo fue de nivel 1. “Ambos
casos han sido por fenómenos meteorológicos, en concreto,
por lluvias e inundaciones”.
En definitiva, cada uno de estos planes marca de forma
detallada cuál sería el protocolo a seguir y eso es lo que
presentarán el próximo día 17 en Madrid los representantes
de Protección Civil de la Ciudad.
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