El presidente de la Ciudad señaló ayer, a su regreso del
descanso estival, que no ha existido contradicción entre la
postura de “apoyo institucional” mantenida por su Gobierno y
las críticas del PP Nacional respecto a las gestiones del
Ejecutivo central en la crisis de la frontera melillense.
Vivas considera que el mantenimiento de las “buenas
relaciones” con Marruecos debe de ser y de hecho es “un
objetivo de todos”, aunque estas no son compatibles, apuntó,
con “presiones, insultos o bloqueos”.
El presidente de la Ciudad, Juan Jesús Vivas, aseguró ayer
no observar “contradicción” entre las posturas del ejecutivo
local y la dirección nacional de su partido, el PP, ni con
el Gobierno melillense en cuanto al conflicto con Marruecos
y la gestión de la crisis por parte del Gobierno central, a
pesar de que desde la Ciudad se expresó el “apoyo
institucional” a las acciones emprendidas por el Gobierno de
Rodríguez Zapatero, criticadas por la cúpula popular.
Vivas recordó que “la Ciudad se pronuncia en el momento en
el que se suscita la crisis”, y mostró su convencimiento de
que “es una posición clara, que consiste en manifestar
nuestra solidaridad con los ciudadanos y el Gobierno de
Melilla, el respaldo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad
del Estado y muy especialmente a los funcionarios de la
Policía Nacional y a sus funcionarias”. Además, el Ejecutivo
ceutí expresó su “respaldo al Gobierno de la Nación para que
actúe como estime pertinente en orden al restablecimiento de
la normalidad y a la mejor defensa de los intereses de
España y, por tanto, de Ceuta y Melilla”.
“Presencia” del Gobierno
De acuerdo con el relato de Vivas, “con posterioridad se ha
producido un pronunciamiento del Partido Popular, de su
dirección general, a través del cual vienen a demandar del
Gobierno de la Nación presencia, actividad y comunicación”.
Para el presidente este esta es una posición sobre la que
“nada tiene que decir en contra, sino todo lo contrario, el
Gobierno de la Ciudad”. Por tanto, Vivas cree que “no ha
habido contradicción” y que además “esa postura de la Ciudad
es por otra parte habitual cada vez que tratamos sobre las
relaciones con el vecino país o de asuntos de índole
fronteriza”.
La mayor unidad posible
En su opinión “tenemos que procurar entre todos conseguir el
mayor grado de unidad posible” en cuestiones como “la
integridad territorial, la exploración, fomento y protección
de las buenas relaciones de cooperación con el Reino de
Marruecos y relativas al correcto funcionamiento de la
frontera”. “En lo fundamental, en el fondo, existe esa
unidad”, subrayó, para añadir que “lo que nos gustaría a
todos es que también hubiera esa unidad en el conjunto”.
“Eso tiene que ser una labor de todos pero el Gobierno no
observa contradición”, reiteró.
Vivas quiso asimismo hacer un “reconocimiento” al Gobierno
de Melilla “que ha dado la cara por Melilla, el Gobierno y
su presidente, y es algo que se ha puesto en evidencia en
toda España”. “Ese comportamiento de dar la cara por Melilla
de la manera que ha estimado conveniente merece del Gobierno
de Ceuta nuestro total respeto, máxima consideración y por
su puesto nuestra mayor solidaridad y muestra de afecto”.
El jefe del Ejecutivo ceutí planteó también “algunas
reflexiones” que “a modo de conclusión” considera “útiles”,
comenzando por considerar que “en todo lo que se ha dicho y
se ha escrito en los últimos días, en que por razones no
deseadas hemos estado de alguna forma en el centro de
atención mediática nacional, se ha hablado mucho de la
frontera de Melilla y también algo menos, por razones
obvias, de la de Ceuta, pero es bueno que todos transmitamos
que las fronteras no son ni de Ceuta ni de Melilla, están en
Ceuta y en Melilla, pero son las fronteras de España y de
Europa y además son peculiares”. Entre sus peculiaridades se
cuenta que son “las dos únicas fronteras terrestres que
España y Europa tienen en el norte de África y además con un
país extracomunitario”. “Este hecho insular tiene que ser
-dijo- una llamada de atención para todos y en especial para
los poderes públicos del Estado y para las instancias
comunitarias en orden a prestar la debida atención a estas
fronteras en materia de seguridad y orden, para responder a
las contingencias que puedan producirse y para que este
hecho singular no se convierta de ninguna manera en un
lastre para el desarrollo de nuestras ciudades o en una
perturbación de servicios públicos o abastecimientos
esenciales”.
Buenas relaciones
A su modo de ver, el mantenimiento de unas buenas relaciones
con Marruecos debe de ser, y en su opinión, es “un objetivo
de todos”, pues Ceuta y Melilla tienen “una posición
estratégica y son muy útiles para la proyección de esas
relaciones que al resto de Europa y de España le convienen”.
También cree Vivas que esa buena relación no es compatible
con “actitudes de presión, insultos a los Cuerpos de
Seguridad o iniciativas dirigidas al bloqueo de ninguna de
nuestras dos ciudades”.
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Del viaje de Rubalcaba Vivas esperaba “lo mejor”
En cuanto al encuentro que el
ministro del Interior tenía previsto ayer en Rabat, Vivas
aseguró que esperaba “lo mejor”. “Espero que tenga el mayor
éxito en ese contacto y que sea un encuentro dirigido a
consolidar las buenas relaciones entre España, nuestra
nación y el vecino Reino de Marruecos, un encuentro en
beneficio de todos y en particular de los intereses de
España y que también signifique restablecer, si ya queda
algo por restablecer, la plena y absoluta normalidad en el
funcionamiento de las fronteras de España y Europa, del
continente africano, que están en Ceuta y en Melilla”,
concluyó.
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