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Apenas quedan seis meses de plazo legal para impulsar el
proceso que permitirá a los profesionales sanitarios del
Hospital Militar adquirir la condición de personal
estatutario de la Administración del Estado, como es
obligado antes de la absorción del centro por el Ingesa.
Según las primeras estimaciones, la gran mayoría desea esta
conversión de su status jurídico por la posibilidad de poder
desarrollar la carrera profesional, salvo quienes se acercan
a la jubilación, no más del 7% del total.
No más del 7% de los aproximadamente noventa profesionales
que conforman la plantilla del personal sanitario que
atiende el Hospital Militar de Ceuta rechazará la conversión
de su actual condición de personal laboral a la de personal
estatutario de la Administración del Estado, un proceso
previo a la absorción del centro por los servicios
sanitarios civiles que debe ponerse en marcha antes del 31
de diciembre de este año.
La mayoría de los hospitales militares del país han pasado
ya a manos civiles, por lo que se espera que las
instalaciones de Ceuta corran el mismo destino y acabe
siendo administrada por el Instituto Nacional de Gestión
Sanitaria (Ingesa).
Estas son las previsiones que maneja el delegado sindical de
CCOO en el centro, Emilio Postigo, quien explicó que no
tiene conocimiento de que vayan a rechazar la condición de
personal estatutario más que aquellos sanitarios que se
estén acercando a la edad de jubilación, y ello no sólo
concierne a médicos, enfermeras y auxiliares de enfermería
sino también a los celadores.
La clave es la carrera profesional, una opción que se abre a
quien adquiera la condición de personal estatutario y que no
cobra sentido en el caso de quienes se acercan a la
jubilación y ya no ambicionan promocionarse. Este proceso y
la absorción por el Ingesa se ha dado también en ciudades
como Melilla.
Otro capítulo de este proyecto es el personal parasanitario.
Postigo mantiene la expectativa de que si la absorción por
el Ingesa obliga a alguna reestructuración del personal
administrativo, este pueda distribuirse por el resto de
servicios con que cuenta la sanidad civil.
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EL FUTURO DE LA SANIDAD PÚBLICA
