Quizá la peor consecuencia de los recortes salariales que
afectan a, entre otros empleados públicos, los médicos, no
sea los actos de protesta convocados, sino la fuga de
cerebros hacia países del entorno europeo donde estos
profesionales se encuentran mejor remunerados. Así lo
vaticina el Sindicato Médico, que asegura que antes de las
medidas de ajuste presupuestario aprobadas por el Parlamento
los galenos españoles ya cobraban tan sólo un 40% de lo que
perciben en Francia, Reino Unido, Alemania y Holanda.
La fuga de cerebros es una característica de países
desarrollados que han entrado en una profunda crisis y no
ofrecen motivación a sus élites científicas. Y este es el
panorama que ha dibujado el Sindicato Médico para los
facultativos que han adquirido su formación en España tras
los ajustes salariales que ha aprobado el Gobierno de
Rodríguez Zapatero para todos los empleados públicos,
incluidos los galenos que ejercen en el Sistema Nacional de
Salud. “Muchos de ellos han optado ya por hacer las maletas
e irse, dado el excelente crédito que tienen en el
extranjero su formación y competencia”, señaló el secretario
general de CESM en Ceuta, Rafael Lavers.
Los médicos, que ya han anunciado sus propios actos de
protesta, dicen movilizarse con un doble objetivo: defender
al Sistema Nacional de Salud de la crisis económica que le
agobia y exigir que la entrega de los facultativos para
mantenerlo a flote durante estos años se corresponda con un
digno tratamiento a la profesión.
Naturalmente, en el fondo de la situación flota un agravio
comparativo en relación con sus colegas europeos en materia
salarial. Según CESM, “los médicos saben que sus
retribuciones suponían antes del recorte no más del cuarenta
por ciento de lo que cobran sus colegas franceses,
británicos, holandeses o alemanes”.
El Sindicato Médico entiende que el sistema sanitario
público está en riesgo de desmantelamiento por culpa de
“políticos manirrotos que anteponen sus particulares
intereses al bien común de todos los españoles”. Para sus
acciones de protesta cuenta con el respaldo del Foro de la
Profesión Médica, integrado, además de por los sindicatos
profesionales, por la Organización Médica Colegial, las
sociedades científicas y los estudiantes de Medicina.
CESM continuó que la movilización del pasado 27 de mayo a
las puertas de los centros de salud no es más que “el
preludio de una gran reacción médica contra las medidas de
contención del gasto decretadas por el Gobierno, que podría
incluso desembocar en la convocatoria de una huelga
general”. De hecho, CESM no cree que “la escasa repercusión
en el sector sanitario de la huelga convocada por las
centrales de clase” sea un reflejo de la apatía del médico.
“Los profesionales sanitarios, y concretamente los médicos,
no son un colectivo de reacciones generales inmediatas,
porque los efectos de las medidas de contención se sentirán
sobre el ejercicio diario a medio y largo plazo”, argumentó.
|
Propuestas para mejorar un sistema de formación muy valorado
El Foro de la Profesión Médica,
que apoya la movilización propugnada por CESM, ha abordado
también una queja emitida por parte de la Conferencia
Nacional de Decanos, relativa a que el ciclo formativo y el
currículum de todo el ciclo formativo de Medicina “tiene
poco peso en la nota final del examen MIR”. Según ha
explicado el Sindicato Médico a este respecto, en esto los
estudiantes mantienen una pequeña discrepancia, aunque lo
que se piensa desde el punto de vista del Foro es que este
debería realizar una propuesta formativa que aporte una
solución que resulte integral y más válida en todas y cada
una de las especialidades médicas que después se puedan
elegir a través del ampliamente reconocido sistema de
formación MIR.
|