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“Yo tengo 57 años y toda mi vida, y durante la de mis padres
y mis abuelos, esto ha sido una reivindicación constante
absolutamente infundada”, dejó claro ayer el presidente
ceutí en declaraciones a Onda Cero, desde donde recordó que
“Ceuta y Melilla tienen una historia común y compartida con
el resto de España. Somos desde siempre una prolongación de
la Península en el Norte de África”.
Vivas lamentó “la Historia nos demuestra” que el país vecino
“de vez en cuando se caracteriza por poner chinas en el
camino cuando percibe inseguridad, debilidad, inquietud o
notoriedad, como ahora con la Presidencia española de la UE,
para salir a la palestra” y abogó porque la relación entre
ambos lados de la frontera esté “basada en el respeto” y “en
la aspiración común de un progreso también compartido en
esta importante zona geoestratégica”.
“A nosotros lo que nos importa es el sentir del resto de los
españoles y en ese sentido nos sentimos muy apoyados”,
concluyó el presidente, que según anunció la portavoz del
Ejecutivo, Yolanda Bel, hoy se reunirá con los portavoces de
los grupos representados en la Asamblea autonómica para
redactar un pronunciamiento institucional consensuado de
reprobación de las posiciones anexionistas del país vecino.
Todos los grupos de la oposición (UDCE, PSOE e IU)
desdeñaron las reivindicaciones territoriales de Marruecos
sobre las dos ciudades autónomas, que calificaron de
“recurrentes” y de “infundadas”, y animaron a “no darles
demasiada relevancia” o directamente a “no hacerles caso”
El presidente de UDCE, Mohamed Ali, abogó por “no hacer
mucho caso” y por no darle “demasiada relevancia” a las
reivindicaciones marroquíes sobre las dos ciudades españolas
en el Norte de África, donde destacó que “somos españoles,
nos sentimos españoles y no hay nada que debatir al
respecto”.
El diputado recordó que el país vecino “agita de vez en
cuando una polémica a la que no debemos prestar más atención
que la justa” y coincidió con el secretario general del PSOE
ceutí, José Antonio Carracao, en que declaraciones de este
tipo “no causan el menor impacto en la ciudadanía”.
El líder socialista opinó además que las peticiones
anexionistas “no dañarán la relación entre los dos países”.
“Por conocidas y recurrentes este tipo de posiciones no nos
causan la menor ansiedad o inquietud”, afirmó Carracao,
quien animó a “pasar página” sobre un tema “al que no merece
la pena darles muchas vueltas por lo infundado que está
desde todos los puntos de vista, desde el histórico al
jurídico”.
El líder de IU en Ceuta, Mohamed Haddu Musa, diputado no
adscrito en la Cámara autonómica señaló directamente al
partido que gobierna en Marruecos, al Istiqlal, formación
que tiene como secretario general a El Fassi, como impulsor
de esta nueva reivindicación. “Son ultraderechistas
desfasados, del siglo pasado”, criticó, “que pretenden
desviar los problemas que tiene el país, el partido y su
líder con absurdas peticiones como esta”. “En IU y en Ceuta
lo tenemos muy claro y no le vamos a hacer ningún caso”,
apostilló.
Melilla, más agresiva
Los políticos melillenses fueron algo más allá en sus
interpretaciones. La secretaria de Comunicación del PP
Regional, Esther Donoso, rechazó “de plano” las palabras de
El Fassi y argumentó que el momento elegido por Marruecos
para insistir en sus posiciones “anexionistas” se debe a que
“posiblemente ha aprovechado la coyuntura de debilidad” que
sufre el Gobierno español con motivo de la crisis económica
y las medidas de recorte del déficit público.
El vicepresidente primero del Gobierno de la ciudad hermana,
Miguel Marín, expresó la “máxima” repulsa del Ejecutivo que
preside Juan José Imbroda ante las reivindicaciones “sin
sentido” del Reino alauita, que, según insistió, no
contribuirán en nada a mantener o mejorar las buenas
relaciones que deben mantener dos países “cuyas políticas
deben estar basadas en la amistad”.
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