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El director general del Área de Menores de Ceuta, Juan
Hernández, asistirá el próximo jueves a una reunión de
responsables autonómicos que se desarrollará en el
Ministerio de Sanidad y donde dos temas claves centrarán el
orden del día: la problemática de los menores extranjeros no
acompañados, conocidos como MENA, y la aprobación de un
protocolo específico para centros terapeúticos de niños y
adolescentes elaborado de manera conjunta entre las
comunidades autónomas y la Fiscalía General del Estado, en
el que Ceuta ha participado añadiendo las experiencias
específicas de la ciudad.
Según el director general del Área de Menores, la presencia
de los MENA puede depender de que los estados que los
albergan tengan niveles superiores de vida. En el caso de
Ceuta, el 98% de los MENA proceden de Marruecos y el perfil
no se corresponde al del niño o adolescente que escapa del
domicilio familiar sino que, “normalmente, en un porcentaje
muy elevado, el MENA que viene aquí es de una familia pobre
del norte marroquí, con insuficiente capacidad económica
para sustentar a muchos hijos y tanto los padres como el
menor deciden que vengan ya que no sólo los mantenemos es
que, además, les damos educación y opciones para una vida
mejor en la que puedan ascender, con idiomas y oficios”,
argumentó Hernández.
Este tema en cuestión centra, en numerosas ocasiones, el
debate de estos encuentros entre los representantes
autonómicos debido al llamado “efecto llamada” y que
consiste en el movimiento de los MENA por el territorio
nacional tras establecer contacto entre ellos mismos sobre
los centros en los que han permanecido internados y sus
condiciones. “Muchos de ellos tienen familiares por toda la
península e incluso hablan a través de la telefonía móvil
pero, fundamentalmente, evalúan las infraestructuras en las
que están para desplazarse a unos u otros sitios y se
producen las escapadas ya que ellos van al colegio, salen a
pasear por las tardes con sus tutores y se integran”, apuntó
Hernández.
Con respecto a los centros terapeúticos, estos se reparten
por todo el territorio nacional aunque la Ciudad carece de
estas instalaciones por lo que tres menores ceutíes sí han
sido derivados a centros de Málaga, Córdoba y Madrid en este
último ejercicio. “Estos menores no están en el sistema de
reforma sino en el de protección pero tampoco pueden estar
en estos centros porque tienen una problemática psicológica
muy importante, definida en muchos casos por los propios
padres, que se sienten impotentes a la hora de imponer su
autoridad sobre el joven y piden al juez el internamiento de
sus hijos. Tras numerosas experiencias problemáticas en
estas infraestructuras, se ha hecho un protocolo conjunto
para que en todos se sigan las mismas actuaciones con
respecto a los menores que en ellas ingresan”, explicó el
director general del Área de Menores, Juan Hernández. Dicho
documento atenderá, entre otras cuestiones, el perfil del
menor, los principios de la intervención, los medios
necesarios, las medidas de contención y la información y
documentación del adolescente, “donde en el trato con los
niños haya unos derechos y unos deberes, que es de lo que se
trata, de una regulación entre las partes”, indicó
Hernández, ya que el objetivo es eliminar esos déficits que
han provocado la enfermedad en el joven, como parálisis
mental, y “nosotros hemos aportado la experiencia de menores
nuestros que han estado derivados en dichos centros de la
península”, apostilló Juan Hernández, responsable del área.
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