El problema surgido el viernes 26 en Sidi Embarek, cuando el
antiguo imán, Ahmed Liazid, ofició el rezo provocando una
pelea con miembros de la comunidad del templo, no quedó ayer
resuelto, sino pospuesto a una nueva reunión el lunes. En
esta ocasión no se llegó a las manos, pero la oración no fue
dirigida por Liazid y tampoco por el actual imán, sino por
el de Muley el-Mehdi como “neutral”, una medida propuesta,
entre otros, por la asociación benéfica Luna Blanca, una de
las más arraigadas en esta mezquita ceutí y cuyos
representantes hicieron el papel de mediadores entre la
FEERI y la UCIDCE, que acompañaba a Liazid.
Los prolegómenos del rezo del viernes en Sidi Embarek fueron
ayer, como se esperaba tras los enfrentamientos del pasado
día 26, tensos. Una hora antes del comienzo de la principal
oración de la semana para los musulmanes, prevista a las
13.30 horas, representantes del Consejo Rector de la
mezquita proferían a las puertas del templo gritos en contra
del anterior imán, Ahmed Liazid, quien finalmente no ofició.
Tampoco lo hizo el imán nombrado por la autoridad religiosa
y al que defiende el Consejo Rector de la mezquita, que
representa a su “comunidad de fieles vecinos”, sino el que
dirige el rezo de los viernes en el templo de Muley el-Mehdi,
Ahmed Ahlal.
‘El Profesor’, como se conoce a Liazid, estuvo apoyado de
nuevo en su propósito de oficiar el rezo por el presidente
de la Unión de Comunidades Islámicas de Ceuta (UCIDCE),
Laarbi Maateis, al que desde las asociaciones de la
Federación de Entidades Religiosas Islámicas de España (FEERI)
se acusa de “radical” por pertenecer al Tabligh, rama del
islam conservador y fundamentalista.
Liazid, con Maateis
Liazid, permanecía apartado en un lateral de la mezquita, a
la que Maateis, acudía para ponerle al corriente de las
“negociaciones” que tenían lugar tanto con el Consejo de
Sidi Embarek como con la FEERI, representada por su delegado
en Ceuta, Mohamed Alí.
Por su parte, el líder de la asociación benéfica Luna
Blanca, Mustafa Abdelkader, llegaba a la mezquita con la
intención de actuar como “mediador” en el conflicto. “La
solución está en ese hombre”, afirmaba en referencia a
Liazid, quien, como religioso afirmaba que había de
renunciar a su intención de oficiar el rezo en pos de la
concordia entre musulmanes.
Tal como relató Abdelkader, la noche anterior se había
tratado ya de alcanzar un acuerdo en una reunión mantenida
entre ambas partes. “Hemos hecho todo lo posible, y una de
las propuestas fue la de un imán neutral para que se pudiera
celebrar sin problemas el rezo del viernes”, explicaba, para
agregar que tras la disputa en torno al imán al que
corresponde oficiar en Sidi Embarek, hay “un rosario de
problemas” a resolver, por lo que emplazó “a las dos
federaciones con representación nacional a llegar a un
acuerdo”.
Abdelkader subrayó el hecho de que a esa hora, poco antes
del inicio del rezo, la mezquita estuviera aún vacía, lo que
interpretaba como el sentir mayoritario de la ‘yamaa’, la
comunidad de fieles del templo, en contra de la presencia de
Liazid, quien tal como explica, renunció en su día a ser el
imán de Sidi Embarek y no ha realizado para su regreso los
trámites necesarios ante la autoridad religiosa competente,
que es la representación en la zona del Ministerio de
Asuntos Religiosos Marroquí. Esta dependencia religiosa de
autoridades del país vecino es precisamente el motivo de
desde la UCIDCE se acuse a la FEERI de “promarroquí”. De una
parte se aseguraba ayer que Liazid “sí que es nacional de
Marruecos” y por la otra se referían a él como “hijo de
Ceuta”. Quien así lo definía era Abdelatif Mohamed,
representante de la Comunidad de Sidi Embarek, una de las
asociaciones de la UCIDCE. “Lo que no puede ser es que en
una mezquita haya seis o siete asociaciones”, aseguraba
Mohamed, atribuyendo a este hecho la causa del conflicto
respecto al imán y manifestando que el Consejo Rector de la
mezquita se ha formado “hace dos días”. Desde Luna Blanca,
otro de sus representantes, su secretario, Abdalah Mohamed,
defendía la legitimidad del Consejo Rector por tratarse de
la asociación que lleva “toda la vida” trabajando en Sidi
Embarek y cuyo miembro más joven, ‘Sahabito’, que se cansó
ayer de gritar “¡No queremos a Liazid! , “tiene 52 años”.
Reunión el lunes
Tras conversar tanto antes del rezo como a la salida del
templo -cuando un hombre gritó en favor de Liazid-, la FEERI
y la UCIDCE se emplazaron, junto a Luna Blanca, para
“dialogar” el próximo lunes, como confirmaron tanto Mohamed
Alí como el representante de Luna Blanca, puesto que Mateeis
se negó a hacer declaraciones a este diario.
|