Felipe Escane reiteró que Pastelero es el elegido para
sustituir a Orúe porque “tiene muchísima ilusión, ‘hambre’
en el mundo del fútbol, conoce el grupo, la plantilla y bajo
nuestro punto de vista está capacitado para alcanzar el
objetivo del club”.
El presidente del Ceuta no se arrepiente de haber fichado a
Orúe, a pesar de que era una apuesta de riesgo por el
desencuentro con un sector de la afición. “Carlos es un gran
profesional y una gran persona. Esta directiva no se
arrepiente de ninguna de las decisiones deportivas tomadas
durante la temporada”.
Preguntado si la reacción del público ante el Betis ‘B’
precipitó la salida de Orúe, contestó que “el público es muy
exigente, después de eliminar al Lorca en Copa y ganar en
Lorquí en el primer partido en casa ya estaban pitando a
Carlos Orúe, algo que me extrañó”.
Escane añadió que “la marcha de Carlos se produce por un
cúmulo de situaciones, resultados negativos, malas
sensaciones del equipo, la afición no está con él y quizás
algunos problemas en el vestuario”.
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