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El director gerente del Ingesa, Juan Carlos Querol,
agradeció ayer también el apoyo prestado por las patrullas
de la Policía Local, que estuvieron escoltando las
ambulancias que se dirigían con los pacientes desde el viejo
hospital de Cruz Roja hasta las nuevas instalaciones de Loma
Colmenar para despejar el tráfico y hacer la operación de
traslado en el menor tiempo posible.
Este tipo de apoyo resulta esencial, puesto que otras
entidades que prestan servicios de transporte hasta el
hospital, como la compañía de autobuses urbanos, habían
alertado de los embotellamientos que se producen en la
carretera que lleva hasta la frontera, por la que hay que
transitar para llegar hasta el nuevo Hospital Universitario
de Ceuta.
La mala situación en el tráfico, que se achaca al exceso de
severidad en los controles fronterizos por parte de
Marruecos, es un asunto que preocupa y que ha llevado a la
compañía de autobuses a pedir un acceso directo para
vehículos públicos hasta el hospital. Las administraciones
parecen haber tenido en cuenta esta circunstancia y ha hecho
todo lo posible para que no afectara al traslado de
pacientes.
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