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El mundo del fútbol se volcó ayer con el joven jugador del
Ciudad de Ceuta que cayó sin conocimiento y estuvo a punto
de morir de asfixia en la competición del domingo en el
Complejo Deportivo Díaz Flor, desde el entrenador del Ceutí,
Juanma López, hasta Quico, del San Agustín, y otros muchos
hasta llegar al presidente de su propio club, Felipe Escane,
y diversos representantes de la Federación de Fútbol de
Ceuta.
El padre del joven, Pedro Rojas, matizó ayer que el
presidente del Subcomité de Fútbol Sala de la federación,
José María Oliveira, sí que acudió al polideportivo donde se
produjo el accidente en cuanto sucedió y que durante la
jornada del domingo llegó a llamar hasta tres veces para
interesarse por el estado de su hijo. Sin embargo, el
presidente del Ciudad de Ceuta, Felipe Escane, esperó hasta
la tarde de ayer. García Gaona explicó que estaba de viaje
de trabajo cuando el accidente y que se interesó por el
joven en cuanto llegó a Ceuta.
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