Sólo un punto. Eso es lo que separa al Ceutí de militar la
próxima temporada en División de Honor. O, como es lo mismo,
sólo un punto (de los innumerables que ha dejado escapar
durante la temporada a domicilio) es lo que le hubiese hecho
falta a los unionistas para ser ya equipo de la máxima
categoría del fútbol nacional juvenil.
Pero ya no hay tiempo para las lamentaciones, y el conjunto
caballa todavía tiene tiempo de redimirse consiguiendo tan
sólo un empate ante el Xerez, al que visitará tras el parón
liguero en una última y decisiva jornada de Liga. Un empate
ante un equipo que matemáticamente es subcampeón y que se
metió en el bolsillo hace varias jornadas el ascenso a
División de Honor.
Mientras, el Natación Ceuta se despedirá de su afición, y de
la categoría, recibiendo a un Unión Sporting que también se
encuentra matemáticamente descendido. Un partido de mero
trámite pero en el que los ceutíes esperan, con un triunfo,
agradecer a su afición el apoyo prestado durante toda la
temporada.
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