Antes de que muera de éxito (para
la Ciudad), como casi todo el mundo coincide que ocurrirá
con el paso de los años y el crecimiento exponencial de sus
números, Martínez puso ayer sobre la mesa la posibilidad de
extender al puerto un sistema de compensación “genérico” de
posibles recortes en su recaudación sobre el modelo fijado
en la Ley de Medidas Fiscales, Administrativas y del Orden
Social de 2002 para el IPSI.
En dicho texto legislativo quedó establecido que “en el caso
de que la recaudación líquida del ejercicio no alcance” una
cuantía equivalente a la recaudación líquida del ejercicio
2001 por dichos conceptos “incrementada en la variación del
PIB nominal, al coste de los factores, habida en el
período”.
El consejero de Economía señaló que la intención es
“introducir una ampliación de las bonificaciones de las
tasas de buque, pasaje y mercancía aplicables en los puertos
de Ceuta y Melilla, que actualmente oscilan entre el 40% y
el 60% y que pasarían al 80%, con el objetivo de contribuir
al abaratamiento del coste de transporte de mercancías y
personas entre ambos territorios y el resto de España, sin
que ello suponga merma recaudatoria para las Autoridades
Portuarias respectivas”.
Garantizar que la Autoridad Portuaria nunca ingrese menos
que “la recaudación líquida del ejercicio 2008 por dichos
conceptos incrementada en la variación del PIB nominal, al
coste de los factores, habida en el período” se dejaría en
manos del ministerio competente, en principio Fomento.
Igualmente, “se propone”, detalló Martínez a los medios de
comunicación, “la creación de un sistema de compensaciones
genéricas que permita abaratar el coste efectivo del
transporte marítimo y aéreo de mercancías entre Ceuta,
Melilla y el resto del territorio nacional para evitar que
el alto precio del transporte marítimo sea un factor de
aislamiento, que encarezca extraordinariamente los costes de
determinados aprovisionamientos básicos y que dificulte el
desarrollo turístico de ambas ciudades”.
Sector náutico
Con el fin de “favorecer la actividad nautico-deportiva” en
ambos ciudades se apuesta por “clarificar y simplificar
significativamente las condiciones de aplicación del règimen
fiscal al condicionarlo de modo exclusivo al domicilio
fiscal en las ciudades de Ceuta y Melilla, terminando con la
actual falta de definición y concreción, lo que ha originado
situaciones conflictiva e impedido el desarrollo de este
nicho de actividad econòmica de Ceuta y Melilla”. Esta
medida, se espera, debería traer más grandes yates a la
ciudad. |