Prácticamente, la totalidad de los jueces ceutíes
secundaron, en la jornada de ayer, la huelga convocada a
nivel nacional; concretamente, ocho de los once titulares
que trabajan en la planta judicial, aunque dos no pudieran
acudir a la concentración por encontrarse de baja. No
obstante, todos ellos acudieron a la manifestación
acompañados por fiscales, secretarios judiciales y miembros
del Palacio de Justicia. En el acto se hizo lectura de las
reivindicaciones básicas del colectivo y se efectuó la
jornada de puertas abiertas para que medios de comunicación
y la ciudadanía en general pudiesen comprobar el estado
actual de los juzgados.
Con los primeros rayos de sol, los juzgados de la ciudad
aparecieron tristes, desolados, silenciosos, sin el climax
natural de letrados y funcionarios escaleras arriba o hacia
los sótanos. Avanzadas las primeras horas, el ruido y el
tumulto cobraron vida, abriendo paso al escenario de un
acontecimiento histórico, como fue en el día de ayer, la
primera huelga convocada por los jueces y magistrados de
toda España.
El Palacio de Justicia fue la sede de la concentración
judicial a la que acudieron once jueces de la ciudad -dos
más no se unieron a la convocatoria al encontrarse de baja
por enfermedad- acompañados por fiscales, secretarios
judiciales y funcionarios. Ocho de ellos, prácticamente la
totalidad, secundaron la huelga aunque se mantuvieron
durante toda la jornada en sus respectivos despachos para
cubrir los servicios mínimos realizando un ejercicio
responsable. Tal y como expresó el portavoz del colectivo,
Jesús Lucena, “no es cierto que no haya atención al
ciudadano hoy; actuaciones urgentes serán atendidas, el
juzgado de guardia está en pleno funcionamiento, todas las
causas con presos serán tramitadas, la atención de los
detenidos, violencia de género, registro civil. Todo sigue
funcionando, no porque nos lo hayan establecido los órganos
competentes sino porque nos hemos autorregulado”, explicó.
Las primeras palabras resumieron en un mínimo común
denominador el motivo de la protesta de los jueces y
magistrados. “Queremos que la Justicia funcione y que
funcione eficazmente. Hemos venido reclamando a los poderes
públicos de manera reiterada desde hace años, que se
realicen las inversiones que son necesarias en medio humanos
y materiales, y acometer la definitiva modernización de la
Justicia, que permita ofrecer a los ciudadanos una Justicia
de calidad y moderna como la sociedad española en estos
momentos necesita”, argumentó Lucena. Estas reclamaciones no
han sido atendidas por los poderes públicos, provocando un
mayor deterioro de la Administración de Justicia, lo que
dificulta el ejercicio de la función jurisdiccional
encaminada a garantizar los derechos y libertades de los
ciudadanos. En definitiva, “pedimos que la Justicia deje de
ser la gran olvidada de la democracia”, apostilló.
Durante la manifestación, se procedió a la lectura de un
escrito de reivindicaciones del colectivo, a destacar, la
incorporación de las nuevas tecnologías a los juzgados así
como la formación adecuada de todo el personal al servicio
de la Administración de Justicia, asegurando las coberturas
de vacantes mediante personal titular. El establecimiento de
la carga máxima de trabajo razonable que puede asumir cada
órgano judicial así como la revisión en profundidad de la
actual planta judicial. En cuanto a las sustituciones,
arbitrar un sistema adecuado mediante jueces titulares. Y en
lo referente a la efectiva conciliación entre vida laboral y
familiar, la inmediata supresión del traslado forzoso por
ascenso.
|
Lucena: “A diferentes estamentos les interesa decir que no
ha habido ningún juez que secunde la huelga”
Sobre los porcentajes y cifras de
jueces y magistrados que secundaron la huelga, “hoy en
España habrá una guerra de cifras ya que por parte de
diversos estamentos hay un evidente interés en decir que no
ha habido prácticamente ningún juez que haya secundado este
paro”, alegó el portavoz, Jesús Lucena. Este quiso añadir
que todos los profesionales de España estaban de acuerdo con
las reivindicaciones y lo que variaba eran las formas de
llevarlas a cabo. “Unos entienden que habría que esperar
hasta el 26 de junio, otros que hay que hacerlo ya, pero en
esencia, todos estamos de acuerdo con lo mismo. Se trata
simplemente de diferentes estrategias”. En las estadísticas
que se utilicen, “hay que descontar a los sustitutos, que
por motivos evidentes no se pondrán en huelga, los que están
de baja por enfermedad, los que se encuentran en licencia
por estudios, los que se encuentran de baja por excedencia,
los sancionados, los que están en servicios especiales, los
jueces que están de permiso ordinario, entendiéndose también
que se incluyan para hacer el cómputo estadísticos los
jueces de paz”.
|