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ACTUALIDAD - MIÉRCOLES, 21 DE ENERO DE 2009


rampas en los ensayos del bus. e.p.

El transporte urbano vuelve a pasar por la calle real
 

Unos retoques en Millán Astray retrasarán hasta mañana el paso del bus por el centro

El vehículo es incapaz de subir la pendiente de la calle sin rozar con el suelo durante el ensayo oficial que realizó ayer y, para subsanarlo, se incrementará el espesor de parte de la calzada durante la mañana de hoy

CEUTA
Luis Parodi

ceuta
@elpueblodeceuta.com

El comienzo de la línea de autobús por el centro está supeditada a unos trabajos de acondicionamiento en la calle Millán Astray. Después de los ensayos oficiales que hizo ayer el nuevo vehículo por el recorrido oficial, durante algo más de media hora, se comprobó que en el segundo tramo de subida por Millán Astray los bajos del autobús rozaban con el suelo. Durante la tarde de ayer se instaló una solera de hormigón y en la mañana de hoy está previsto que sobre esta plataforma se coloque una capa de rodadura de dos centímetros. Si no llueve y el material termina de fraguar, no habría problemas para verlo circular mañana.

Eran las 12.00 horas cuando el autobús que va a hacer el recorrido por el centro paró en la plaza de la Constitución. Los periodistas y medios gráficos subieron adentro, donde ya se encontraban un policía local y el jefe de personal de la empresa Hadu Almadraba, Manuel Cuéllar. Las puertas se cerraron y el vehículo puso rumbo a Millán Astray pasando por la Marina. En este punto, el autobús hizo su primera parada obligatoria, cuando estuvo cerca de chocar con las vallas que la empresa de alumbrado ha plantado para instalar un cableado subterráneo. Una vez solventado el problema y sin que el autobús rozara el suelo, éste enfiló la pendiente de Millán Astray con sus más de 260 caballos de potencia. Pero tuvo que detenerse nuevamente, esta vez en Antioco, antes de iniciar el segundo tramo de Millán Astray. Este punto fue el único conflictivo del día, el que va a retrasar el inicio del servicio de transporte público hasta mañana (estaba previsto, según anunció ayer mismo por la mañana Yolanda Bel, que comenzara hoy). Allí, varios técnicos y operarios observaban las dificultades del conductor para continuar con el trayecto. Tanto la parte delantera como la trasera rozaban el suelo. Cuéllar, analizando la situación desde la calle, recibía una opinión contraria a la implantación del autobús por el centro. “No hay derecho a que pase el autobús”. Y aplacaba el golpe con desconcierto, puesto que la decisión no es suya, sino de los que gobiernan, a petición vecinal.

Otra vez, todos dentro del autobús, éste continuaba su marcha. Se enfrentaba a la iglesia de San Francisco y sorteaba los podados naranjos del último tramo de Millán Astray. Enfrente de la Plaza de los Reyes, donde deberá hacer su primera parada, se preparaba para adentrarse en una poblada calle Real. La gente se paraba incrédula: “¿El autobús por aquí?”. Pues sí, dentro de poco. La calle Real la pasaba sin apuros, sin que el chófer tuviera que acudir a la taumaturgia y a algo más de 10 kilómetros por hora; y así, pasaba las otras cuatro paradas que tendrá que hacer: Instituto de la Seguridad Social, Azcárate, Maestranza y San Amaro.

Después de cubrir el recorrido por primera vez, volvía a Millán Astray de nuevo, donde se acumulaban más técnicos y operarios. Habían traido unas rampas para comprobar si a más espesor su ascenso por Millán Astray sería más cómodo. Y, en efecto, sobre el terreno, Cuéllar y el técnico decidían que había que colocar una nueva capa de hormigón. Durante la tarde de ayer, se instaló una solera de hormigón que tendría que fraguar -con el fin de ofrecer resistencia-, para que hoy sobre esta plataforma se pusiera una capa de rodadura de dos centímetros de espesor. En total 16 metros cuadrados de superficie. Si no hay contratiempos el bus del centro empezará mañana.
 


Un autobús ligero pensado para los discapacitados

Se ha rumoreado que el autobús no sería como los corrientes de la empresa Hadu Almadraba, sino un microbús. Esta idea, comentada como una posibiliad desde el Gobierno, nunca ha sido compartida por los directivos de esta compañía. Sin embargo, el autobús es unos metros más pequeño que el resto de la flota de Hadu Almadraba y mide alrededor de nueve metros, “Tiene la misma longitud que los que hacen el recorrido hacia San Amaro”, comentó Cuéllar. Este vehículo cuenta con dos años de antigüedad y está equipado para atender a los discapacitados, algo que se puso en duda desde la ‘Plataforma de la calle Real’. En su interior cuenta con 13 asientos, aire acondicionado, rampa para los minusválidos, piso bajo continuo y 260 caballos de pontencia.
 


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