”El acusado reconoce los hechos desde un primer momento y
hemos renunciado, y creemos que no es necesaria, la
declaración de la madre de Suhaila ni la de su hermana, por
no hacerles pasar por esto, ni declarar delante de él”,
explicó la abogada de la acusación particular, quién añadió
que al cumplirse en el día de hoy dos años de la muerte de
la pequeña, “Mina está muy afectada y ha vuelto a recaer en
la tragedia por la multitud de noticias en estos últimos
días”.
Para la segunda sesión del juicio de Suhaila se esperaban
las declaraciones de Mina Ahmed Abdeselam, madre de la
pequeña de siete años, y Fátima Sohora Ahmed, hermana de la
niña. Ambas, permanecieron distantes durante la sesión
matinal aunque por la tarde el sufrimiento y el dolor unidos
al recuerdo de la pequeña Suhaila las unió para lanzar
insultos al acusado en sus desplazamientos por los pasillos
de la Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta.
La acusación particular, que en un principio exigió un
agravante de superioridad, solicitó una pena de 20 de años
de prisión, una indemnización por daños morales y
psicológicos de 125.000 euros y que el acusado, Kassem El
Yassini no regrese a Ceuta en 10 años. El que sí fue llamado
a declarar, en la sesión de ayer, fue el marido de Fátima
Sohora Ahmed, hermana de Suhaila. El testigo afirmó conocer
al acusado por la relación sentimental que mantuvo con su
suegra aunque “no he tenido nunca ningún diálogo con él”.
Además J.C.A. declaró haber visto a la niña tirada en el
suelo. “Inspeccioné la casa y todo parecía normal e intenté
abrir la puerta pero no pude porque estaba cerrada bajo
llave. Luego los vecinos me contaron que el acusado cayó de
espaldas cuando bajó de la vivienda y que estaba muy
nervioso. Además calló de espaldas, me contaron otros
particulares”.
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