El diputado popular por Ceuta, Francisco Antonio González
distingue claramente el hecho de contar con unas “excelentes
relaciones con Marruecos. Que deseamos claramente”, con la
aceptación o la permisividad de oir afrentas a la
Constitución española desde el momento en que se reiteran en
querer discutir “lo que para el PP es indiscutible”.
En primer lugar, González Pérez llamó la atención de que en
el recibimiento a todo un presidente de España “hubieran
escasísimos símbolos españoles. Sólo una bandera. Aunque
hemos de reconocer que en Marruecos se prepara la Fiesta del
Trono y en ese contexto deberemos interpretarlo. En segundo
lugar dejó claro que no va a estar permanentemente
defendiendo “algo que no hace falta defender, porque Ceuta y
Melilla son españolas y punto”.
“Mientras el Gobierno socialista niega sistemáticamente que
este tema esté incluido en las agendas de trabajo los hechos
muestran otra cosa en función de las palabras y
declaraciones de los dirigentes marroquíes”. Para González
Pérez esta actitud es “cuanto menos extraña”. Criticó la
ausencia de declaraciones del presidente del Gobierno,
Rodíguez Zapatero “en Marruecos para decirles a sus
gobernantes lo que debe decírsele en relación a las ciudades
de Ceuta y Melilla”. Echó de menos una reacción en la
dirección de afirmar que “esos asuntos están zanjados y no
tienen discusión”. “La leyes internacionales, el ámbito
jurídico, la Constitución española dejan claro que Ceuta y
Melilla forman parte de nuestro país y no hay más que
hablar”, dijo. “Lo que más me molesta de este Gobierno es la
ambigüedad y la falta de decisión. Esconde bajo cortinas de
humo lo que trata a escondidas”.
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