La expresión ‘El perro es el mejor amigo del hombre’ cobra
especial sentido en el día a día de los TEDAX, ya que el
olfato del can con el que conviven llega la mayoría de las
veces allí donde un escáner no es capaz de detectar. En la
actualidad ceutí, hay en activo un servicio de guías caninos
las 24 horas del día, que toman como emplazamiento regular
para sus visitas los puntos de máxima alerta en la ciudad:
la Estación Marítima del puerto y la frontera del Tarajal.
“Siempre hay un compañero con los perros alerta, en caso de
que haya que salir a identificar algo”, expresó Toquero, que
advirtió que este rastreo de sabuesos es una actividad que
se realiza con especial ímpetu y a lo lago de todo el día,
estableciendo turnos tanto para los policías como para los
animales, hasta cubrir las 24 horas del día.
“Una vez una persona gastó una broma en el servicio de
Correos de Benzú”. Fue hace cinco años y consistió en que
este ‘gracioso’ roció con talco una carta que tenía como
destinatario un vecino suyo, al cual “quería acojonar”. El
equipo de los TEDAX acudió inmediatamente con el Equipo de
Protección Individual, que es un traje aislante con un
material especial y que se usa en las investigaciones donde
hay una sospecha de alarma bacteriológica o biológica. De
esta forma, “se puede examinar un objeto, caja o carta sin
que el operario entre en contacto con la sustancia”
permitiendo trabajar sin exponerse al peligro. Sin duda, la
herramienta principal puede ser un robot que nos recuerda a
la película ‘Cortocircuito’, pero esta funciona a la
perfección tal y como mostró el equipo TEDAX a EL PUEBLO. Se
trata de la AUNAV 53, un carro móvil todoterreno dotado de
brazo móvil con pinza, para manipular objetos, y que cuenta
además con cuatro cámaras para identificar el entorno
cubriendo un radio de 180 grados. Está accionado por control
remoto hasta una distancia de 200 metros, a través de un
joystick, y un ordenador portátil encerrado en una maleta,
en cuya pantalla se pueden observar las imágenes captadas
por las cuatro cámaras en tiempo real. “Con el AUNAV 53 se
puede trabajar dentro del foco de una explosión sin que el
operador esté cerca de ella”.
Aún así, “siempre hay que acercarse a la bomba”, ya que un
paquete se puede desplazar de un lugar a otro para separarla
de una zona de riesgo por explosivo, como un contenedor de
fuel, pero será “finalmente el TEDAX el que abra el paquete
para cortar los cables de la bomba para desactivarla, porque
el robot no está preparado para hacerlo por sí mismo”.
Cuenta además con una escopeta amarrada a su brazo, en caso
de tener que arrestar a un terrorista que esté a punto de
inmolarse. Además, este brazo móvil cuenta con una bomba de
agua, con la que se puede apagar un pequeño incendio, además
de aislar un térmicamente un explosivo que pueda ser
detonado por la cercanía a una fuente de calor. En
ocasiones, la amenaza procede del propio aire que
respiramos. Para ello, los TEDAX trabajan con el ‘Chempro’,
un analizador de gases de reconocimiento terrestre,
informando mediante los sensores adecuados si una zona
pudiera ser radioactiva o contener gases nocivos.
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