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En las conclusiones de su informe el Ára de Proyectos y
Obras de la Consejería de Fomento destaca que “la ubicación
[del Mercado Central de Abastos] en la Plaza Rafael Gilbert
cuenta con viabilidad desde todos los puntos de vista a
excepción de la agilidad temporal y la incertidumbre de
ejecución dada la necesidad de tener que llevar a cabo una
expropiación forzosa con al menos unas 31 propiedades”.
“Asimismo para ejecutar dicha opción será necesario sufragar
un alto coste económico [22,2 millones de euros frente a los
22,4 que se preveía costaría alquilar durante 30 años la
Manzana]”, concluye en su primer argumento el arquitecto
Raúl Ruiz González.
Entre las ventajas que este aportaba a la Manzana con
respecto a Plaza Vieja contaba, además, su mayor superficie
(4.340 metros cuadrados frente a los casi 2.800 de Rafael
Gilbert), y la facilidad y “agilidad” que entraña negociar
con un solopropietario en lugar de con varios a los que
además hay que pagar lucros cesantes y otras
indemnizaciones.
Por último, el arquitecto consideraba en enero de este año
que la Manzana tenía “ventajas por su ubicación estratégica
desde el punto de vista de la estructura urbana” para los
usuarios en forma de espacios públicos libres, aparcamientos
y paradas de transporte público.
Las opciones del Ceuta-Center o Víctori Goñalos las daba por
inviables.
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nuevo mercado central
