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El presidente del Ejecutivo local, Juan Vivas, mostró ayer
su preocupación por “el momento dífícil” que está
atravesando el sector del transporte en estos momentos, “y
no sólo en España, sino en toda Europa, como consecuencia de
la espectacular subida que han sufrido los carburantes”.
Pero, sobre todo, se preocupó por la amenaza del efecto
colateral de esta huelga, que tendrá “especial incidencia”
en una ciudad como la de Ceuta, que necesita en gran medida
de los productos de primera necesidad llegados desde la
Península. “Deseo que el problema se solucione y que la
huelga no se llegue a consumar, ya que estamos hablando de
la futura carestía de servicios públicos fundamentales en
una ciudad extrapeninsular, que depende en gran medida del
abastecimiento que llega desde el otro lado del
Mediterráneo”. Por ello, “esperamos que se establezcan
mecanismos para compensar esta subida en el coste del
combustible”.
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HUELGA DE
TRANSPORTES
