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Anda por ahí cierto personal muy
preocupado, tapándose los oídos de la contaminación acústica
emitida por el sonoro canto de dos nuevas estrellas de la
canción: en España “El Nene” y en Marruecos “El Piluca”. En
cuanto a “El Nene” a mí no me cae tan mal, porque nunca dejó
de tener un corazón pinturero: en Ceuta, ciudad querida, en
la cúspide de su carrera tal y como había vaticinado aquella
vidente de Zurrón cuando, apenas un crío, acudió a ella
entre planeo y planeo hasta Gibraltar acarreando ora tabaco,
ora droga y a la que recompensó con una gruesa cadena de
oro, fue siempre generoso ayudando económicamente a mucha
gente necesitada y haciendo obras de caridad. No se crean
todo lo que plumas sin adjetivar han escrito sobre él….
¿Propietario de millones de euros…..?. ¡Bah!, yo no creo que
sea para tanto porque en ese caso sería muy imbécil (y tonto
no es) para haber seguido jugándose el tipo, a toda pastilla
a bordo de una neumática, en las aguas del Estrecho. Vayan a
echarle un vistazo a su chalet de Benítez, subiendo al
pantano: sin rematar y con la piscina hundiéndose… Sí, esa
piscina en la que malas lenguas contaron que arrojaba a sus
enemigos para ser comidos como picadillo por cocodrilos o
caimanes, no sé la especie… Parece que allí fueron los del
CSI español, con su laboratorio a cuestas y ni rastro del
bulo. Lo que sí tuvo el Nene fue un simpático león (en
aquella época en la que estaba de modo soltarlos a correr
por El Príncipe) que, juguetón, acabó el pobre colgado de la
melena tras saltar de la azotea de un piso en el barrio de
Hadú, sí hombre, enfrente de la relojería “La Suiza”.
Tampoco fue la detención como leyeron, conduciendo a bordo
del coche de su hermano… Pues no, fue interceptado saliendo
de un café de La Gran Vía en compañía de otros dos
ciudadanos, camino del citado vehículo aparcado en las
cercanías. ¡Como para fiarse de los periódicos!.
¿No les parece un poco raro que apenas se siga comentando el
caso…? No hay interés en airear el asunto. Ciertamente el
Cuerpo Nacional de Policía fue diligente, pues en menos de
24 horas tras la llegada de la requisitoria de Interpol (a
petición de Marruecos), ¡zas!, “¡Arriba las manos, date
preso Nene!”. Dicho y hecho, Anacleto. A mí lo que siguen
sin encajarme son los tiempos, porque según los datos que
manejo la orden de busca y captura llevaba casi tres meses
digamos que “aparcada” en Madrid. Barrunto que el “Nene”
(con impecable nacionalidad española, pero parece que
también marroquí y reclamado internacionalmente por el
vecino país) pueda ser utilizado como moneda de cambio, en
aras de la colaboración policial hispano-marroquí, tras la
próxima visita del Presidente Rodríguez Zapatero a Rabat. Ya
verán. Y encima el hombre escaso de liquidez, normal después
de haber sido extorsionado en ambos países durante los
últimos años.
Lo que podrían hacer los responsables de ambos lados de El
Tarajal es desmantelar ya la red mafiosa con epicentro en
Ceuta que, según mis datos, a cambio de entre un 5% y un 7%
de “peaje” defrauda más de 280 millones de euros al año,
amparada por las triquiñuelas legalistas y la cobertura
política de conocidos personajes de ambos lados de la
frontera. ¿O no hay huevos? Digo.
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OPINIÓN / SNIPER
