“Vemos que los gobiernos locales están más sensibilizados
que la propia Administración Central sobre este problema”,
comentó el presidente del Club Ducati-Andalucía, Pedro
Lissen, grupo motero que visita la ciudad por segunda vez en
su historia, acto organizado por el ceutí José María Gómez.
“Pero aún así no es suficiente”, sentenció Gómez, que matizó
que “aún no ha demasiada implicación” sobre la habilitación
de dispositivos homologados en las carreteras.
Según fuentes del colectivo, DGT recaudará este año unos 322
millones de euros en concepto de multas, y, con “tan sólo el
14 por ciento de estos ingresos se resolvería el problema de
los guardarraíles”, puesto que cambiar todos las barreras
ilegales por dispositivos homologados se traduce en una
inversión de 44 millones de euros. La DGT adquirió
recientemente un nuevo helicóptero con rádar para controlar
las infracciones.
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