Pregunta.- ¿Qué balance hace de la lucha contra la
violencia de género con respecto en el último año?
Respuesta.- En general ha habido bastante avance para
afrontar esta problemática. Llevo ya trabajando 15 años en
el Centro Asesor de la Mujer y recuerdo que en mis comienzos
no había ni por asomo lo que existe hoy en día. Hemos
avanzado mucho con las reformas legales, las órdenes de
alejamiento, la Ley Integral contra los malos tratos, la Ley
de Igualdad y, por supuesto, desde todos los planes que
desde cada autonomía se han ido implantando, lo que es el
reflejo del cada vez mayor compromiso social. Lo cual no
quiere decir que el problema se haya erradicado, pero sí
que, desde mi experiencia, ahora tengo muchos más medios y
herramientas que cuando empecé.
P.- Sin embargo, hemos llegado al mes de noviembre superando
las muertes por violencia de género de todo el año 2006.
R.- Tristemente nos vuelve a recordar que hay que seguir
trabajando. A pesar de las campañas y las leyes, esa
violencia continúa y provocando más víctimas que el año
pasado. Llevamos 69 y 2006 concluyó con 67, pero esto son
las estadísticas oficiales, ya que en las jornadas y
seminarios se comenta que no se contabilizan otras muchas
más víctimas a las que se les complica su salud a causa de
los malos tratos. Tampoco se contabilizan los suicidios y un
porcentaje muy elevado de las mujeres que se suicidan sufren
acosos.
P.- ¿Está relacionado con que la mujer se atreve a
denunciar? Lo cual no sería un dato tan negativo.
R.- Exactamente. Tiene esa doble lectura. Por un lado, que
la violencia de género sigue subiendo, pero que por otro,
las mujeres víctimas se animan a salir de ese infierno. Por
eso también aumentan las muertes, porque los especialistas
dicen que el ataque mortal surge cuando piensa el agresor
que va a perder definitivamente a su víctima.
P.- Entonces, hay que trabajar también mucho en la
protección.
R.- Ese sí que es un reto en el que todavía no se ha logrado
la fórmula correcta. En el País Vasco han sugerido poner una
escolta a las víctimas, pero eso tiene que ser muy costoso.
En la Comunidad de Madrid están usando un dispositivo
israelí que es una pulserita que colocan al hombre y a la
mujer. Cada vez que el maltratador, el dispositivo avisa. A
mí me parece un recurso muy interesante, lo que pasa que en
Madrid funcionará mejor que en una ciudad tan pequeña, que a
lo mejor está continuamente sonando. Por otro lado, ya
existe el teléfono de teleasistencia móvil, pero claro,
cuando lo pulsa es cuando ya hay peligro. Y el peligro ya
está ahí.
P.- ¿Qué le parece la polémica que ha surgido a raíz del
programa ‘El diario de Patricia’ en el que murió una mujer a
la que reunieron con su acosador?
R.- De entrada ha servido para que el Gobierno haya
convocado a todas las cadenas de televisión para que
replantee estos programas. Se ha tardado bastante en
regularlo y es una lástima que se haya esperado que cinco
mujeres hayan muerto a resultas de ir al programa, aunque,
obviamente, el responsable es el agresor; pero el programa
precipitó de alguna manera el desenlace. Además, en este
programa ha sido la segunda muerte. Todavía es peor cuando
te enteras que ella fue engañada, pensando que la iban a
reunir con algún familiar.
P.- ¿Qué le diría a una mujer que sufre malos tratos?
R.- Que no estás sola. Hay servicios a los que pueden acudir
y donde hay profesionales que las van a escuchar y que la
irán orientando en el proceso que ella decida emprender.
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