Con la llegada del verano y el comienzo de las vacaciones,
la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC)
ofrece ciertas recomendaciones para evitar lesiones tan
frecuentes en estas fechas, como las quemaduras solares y
las picaduras de insectos y animales marinos.
Desde semFYC destacan que la exposición al sol sin
protección es un riesgo, no sólo por el peligro de sufrir
quemaduras, sino porque la excesiva exposición solar puede
provocar arrugas, manchas y cáncer de piel.
Asimismo, afirman que los niños, los ancianos, las personas
de piel clara y con muchos lunares y aquellos con
antecedentes familiares de cáncer de piel deben tener
especial precaución frente al sol.
Entre las principales medidas de prevención se encuentran
buscar la sombra y evitar, sobre todo, los rayos del sol
entre las 12:00 del mediodía y las 17:00 horas. Además, en
caso de acudir a la montaña, declaran que hay que tener en
cuenta que la intensidad de los rayos solares es mayor
debido a la altura y la piel se puede quemar en menos
tiempo.
Ropa ligera
Otra de las recomendaciones que realizan desde la Sociedad
Española de Medicina de Familia y Comunitaria es el uso de
sombreros que cubran la nariz, los párpados y las orejas,
así como el empleo de ropa ligera que cubra los brazos y las
piernas, además de las gafas de sol.
Los expertos recomiendan, además, que se utilicen
protectores de piel que contengan factores de protección
solar frente a radiaciones ultravioleta A y B. Entre los
protectores que se pueden elegir están el del número 15, del
30 o incluso más alto. Para evitar quemaduras, los médicos
describen que hay que aplicarlos en toda la piel expuesta al
sol 30 minutos antes de comenzar la exposición y, si se
tiene poco pelo, es recomendable aplicar el protector en la
cabeza. Después, será necesario que repita la aplicación
cada dos horas y siempre que sude mucho o se bañe.
Desde semFYC informan a la ciudadanía de que los rayos
solares se reflejan en el agua, en la arena y en la nieve,
por lo que hay que protegerse también dentro del agua, bajo
la sombrilla o en la nieve. Para evitar la deshidratación,
afirman que hay que beber abundante agua y si tiene alguna
enfermedad de la piel o se está tomando algún medicamento
nuevo, recomiendan consultar al médico antes de exponerse al
sol.
Quemaduras solares
En caso de que ya se sufra una quemadura solar, los expertos
indican aplicar sobre la quemadura paños húmedos y fríos
durante 10 ó 15 minutos varias veces al día para aliviar el
calor y el dolor. Después, es conveniente aplicar una loción
hidratante o gel de aloe vera y no romper ampollas si
aparecen.
Asimismo, es recomendable proteger la piel quemada de nuevas
exposiciones al sol hasta que se cure totalmente y durante
varias semanas después. Si la quemadura se presenta con
grandes y dolorosas ampollas y si se tiene fiebre,
escalofríos, náuseas, sensación de mareo o debilidad hay que
acudir al médico.También hay que acudir al especialista en
el caso de que se aprecie una lesión nueva en la piel,
especialmente, si es diferente a otras que se tengan, o si
se aprecian cambios en algún lunar.
Los niños
La Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), advierte, en
su decálogo de recomendaciones, que hay que prestar especial
atención a los niños, ya que aunque la luz solar es
beneficiosa para su desarrollo, si es menor de tres años se
debe evitar su exposición directa al sol.
En niños mayores y adolescentes es necesario seguir las
medidas previamente recomendadas y enseñarles a protegerse
de las radiaciones solares. Además, se insiste en que hay
que protegerse igual tanto los días nublados como los de
sol.
En el caso de las lámparas y camas bronceadoras, desde la
Asociación Española contra el Cáncer destacan que estos
métodos de bronceado no protegen de las radiaciones solares
y que son igualmente perjudiciales para la piel y los ojos.
Además, desde la Asociación desaconsejan su uso en niños
pequeños y adolescentes.
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Una serie de recomendaciones que hay que tener en cuenta
Desde la Sociedad Española de
Medicina de Familia y Comunitaria afirman que, entre las
principales medidas de prevención, se encuentran buscar la
sombra y evitar los rayos del sol, sobre todo, entre las
12:00 horas del mediodía y las 17:00 horas.
Otras recomendaciones que realizan desde semFYc son, por
ejemplo, el uso de sombreros y el empleo de ropa ligera y la
utilización de protectores de piel que contengan factores de
protección solar frente a radiaciones ultravioleta A y B,
aplicándolos cada dos horas y siempre que se sude o se bañe.
En caso de sufrir una quemadura solar, los expertos indican
aplicar sobre la quemadura paños húmedos y fríos durante 10
ó 15 minutos varias veces al día para aliviar el calor y el
dolor. Después, es conveniente aplicar una loción hidratante
y no romper las ampollas si aparecen.
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