La ocasión fue propicia para que el embajador de España en
Marruecos, Luis Planas, opinara de algunos temas que los
periodistas desplazados desde Ceuta a Tetuán con motivo de
la inauguración de una ampliación en el hospital civil
pusieron sobre la mesa. Entre las oportunidades de cara al
futuro para el norte de Africa, el diplomático destacó la
importancia de aprovechar la coyuntura económica que supone
la puesta en marcha del puerto Tánger-med. “Si somos
inteligentes y espero que se convierta en un puente entre
ambos países y no otra cosa. Si el norte de Marruecos se
desarrolla eso será sin duda una buena noticia para el
conjunto de España y para el conjunto de Europa”, afirmó.
“Simplemente nos encontramos en un buen momento en las
relaciones bilaterales entre España y Marruecos”, continuó
Planas, “lo cual se evidencia sin duda a nivel político y de
contactos entre su majestades los Reyes y el Rey de
Marruecos, entre los gobiernos, entre los ministros y se
evidencia, sobre todo, estadísticamente de forma muy
significativa en intercambios económicos y también en el
turismo y el movimiento de personas”. El Gobierno español
estima que a final de 2007 las cifras de comercio bilateral
hispanomarroquí superen los 5.500 millones de euros, lo que
supondrá un crecimiento del 20 por ciento respecto al año
pasado. Las previsiones de los cuatro primeros meses del año
en materia de turismo reflejan un incremento de un 16 ó 17
por ciento, hasta superar el medio millón de turistas
españoles en Marruecos. “Ahora estamos haciendo una política
intentando mostrar que para ir y trabajar en España hay
medios más seguros y lícitos para poder hacerlo. Y a través
del INEM y el Servicio de Trabajo marroquí tienen
posibilidad de acceder a determinados puestos de trabajo
temporal o indefinido en determinados sectores que están
faltos de mano de obra”, explica el embajador. Esta “buena”
sintonía, estos proyectos de cooperación pueden beneficiar a
la ciudad autónoma, en la medida que sus ciudadanos lo
estimen oportuno. “Creo que todo este momento no es ajeno a
Ceuta, son ustedes quienes residen allí, quienes tienen que
dar su punto de vista al respecto pero entiendo que el
conjunto en materia de salud, educación en todos los
aspectos, que Marruecos sea un país estable, que prospere
económicamente es un factor positivo”, sentenció.
En cuanto a la creación de una futura aduana comercial entre
Marruecos y Ceuta, Luis Planas, no descartó que en un futuro
pueda producirse aunque insistió en que tanto el país vecino
como los agentes internacionales tendrán que posicionarse
ante la evolución que experimentará el periodo transitorio
del tratado de asociación con la Unión Europea. El embajador
español en Marruecos se despidió con amabilidad, dispuesto a
volver a Tetuán y con las miras puestas en el desarrollo de
la zona norte.
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