El comienzo de las obras para la futura Estación Depuradora
de Aguas Residuales (EDAR) irá acompañado del inicio de un
seguimiento arqueológico que la empresa Arqueotectura
realizará en el perímetro del monte Hacho a la carretera de
San Amaro. Un completo análisis sobre los movimientos de
tierra que se generarán para dar a conocer el informe de
daños en un terreno que, se presume, podría desvelar restos
históricos.
Según indica el responsable de Arqueotectura, José Suárez,
el proyecto conllevará alrededor de cinco meses -dentro de
los 23 previstos para el levantamiento de la EDAR-, tiempo
tras el cual procederá a la redacción del estudio.
Tal como explica Suárez, el retraso en el inicio del
seguimiento arqueológico, que estaba previsto para después
de Semana Santa, se ha producido por problemas de última
hora en el ámbito de la obra general, pero sus expectativas
rondan la idea de comenzar a trabajar en próximas semanas.
Dadas las características del terreno y su entorno, José
Suárez prevé que se encuentren restos arqueológicos a través
de los movimientos de tierra en el trabajo de la nueva
estación depuradora.
|