A partir de octubre, un buque de Acciona Trasmediterránea
pernoctará a diario en Ceuta introduciendo así “un factor de
seguridad para la población”, según ha explicado el portavoz
socialista de Infraestructuras en el Congreso, Salvador de
la Encina.
Ésta es una de las obligaciones contraidas por la naviera a
raíz de que se le concediera, este verano, la línea de
interés público.
Ayer, los directores generales de las tres compañías que
operan en la línea del Estrecho mantuvieron una reunión para
tratar de llegar a un acuerdo sobre la intercambiabilidad de
billetes. De la Encina espera que éstas sean sensibles a las
peticiones de los usuarios aunque ya ha advertido que no es
competencia del Gobierno lograr que el precio de los
billetes varíe más de una naviera a otra y sea más barato:
“estamos en una economía de libre mercado y el Gobierno no
puede marcar los precios aunque sí establece un máximo al
que no se llega”.
Según ha explicado, una intervención directa del Gobierno
supondría la inmediata intervención del Tribunal de Defensa
de la Competencia que “daría al traste con cualquier fórmula
porque lo que precisamente garantiza este organismo es la
libre competencia”.
Salvador de la Encina ha recordado que lo que sí puede hacer
el Gobierno es subvencionar al residente y que para 2007 las
reducciones para el transporte marítimo y aéreo llegarán a
ser del 50% sobre el precio establecido para los billetes.
Con respecto a la posibilidad de que se produzcan rotaciones
nocturnas entre los puertos de Ceuta y Algeciras, ha dicho
que es una decisión que compete sólo a las navieras en
función de sus necesidades y sus economías. “No podemos
exigir un determinado horario porque eso ya responde a
criterios meramente empresariales aunque sí fijamos un
mínimo de rotaciones diarias”.
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