“De acuerdo con el espíritu del interlineado el billete de
tarifa general de ida y vuelta es perfectamente
intercambiable”, explica el capitán marítimo de Ceuta y
responsable de la Cámara de Compensación, un órgano que se
encarga de tutelar el interlineado y gestionar las
compensaciones que se establecen como consecuencia de su
implantación. Para Jesús Fernández Lera, la actual
interpretación del acuerdo “contraviene el espíritu de la
intercambiabilidad”. “Cogido el documento literalmente, la
interpretación que están aplicando las navieras es lícita,
aunque el espíritu del acuerdo interlineado es que la tarifa
general se intercambia, sea la tarifa simple o la de ida y
vuelta (que tienen un descuento idéntico), quedando fuera
del acuerdo las ofertas específicas que aplica cada
naviera”.
La sentencia del Tribunal de la Competencia resuelve que
todas las navieras vuelven a la intercambiabilidad en
aquellas tarifas que, sin tener por qué ser las máximas,
sean generales, es decir, las mismas para los tres barcos.
Según fuentes próximas a las navieras, el principal escollo
estriba en estos momentos en la empresa Acciona
Trasmediterránea, estando Buquebus más próximo a encontrar
un acuerdo. El mayor problema de la interpretación actual de
este acuerdo es la falta de información a la que han sido
sometidos los usuarios de las navieras, principalmente los
ceutíes, que son quienes sustentan los negocios durante la
mayor parte del año.
El Ministerio de Fomento ya ha tomado cartas en el asunto y
se ha puesto en contacto con las navieras que operan en el
Estrecho para transmitirles el malestar que está causando
entre usuarios y responsables políticos la actual
interpretación del acuerdo de intercambiabilidad. El
diputado socialista, Salvador de la Encina se reúne mañana
con el director general de la Marina Mercante y el
secretario general de Transporte para tratar de mediar en la
cuestión.
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