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El comunicado que la Comunidad
Islámica de Ceuta ha enviado a los medios respecto de la
polémica surgida en torno a las palabras malinterpretadas
que fue emitida recientemente por el Papa Benedicto XVI,
está plagado de comprensión, responsabilidad y de paz.
Palabras que claman la bondad de Dios y llaman a la
reflexión. La Comunidad Islámica de Ceuta en un gesto
honroso y enorgullecedor para el resto de la sociedad ceutí
quiere desvincular la violencia del Islam; a los violentos y
manipuladores, de los designios de la verdadera fe.
En un mensaje a todos los musulmanes de Ceuta y a la
sociedad en general, llama a la reflexión sobre las palabras
del Papa de los cristianos en los sigientes términos:
“tendrás que reflexionar si con una declaración así, está
siendo -el Papa- un valeroso defensor de la Verdad; si está
siendo el destacado favorecedor de la Paz que todos
esperamos y hacia el que también los fieles musulmanes
dirigimos nuestra mirada”. Las madres musulmanas enseñan a
sus hijos la bondad del mensaje de Jesus “el hijo de Mariam,
la palabra de la Verdad, sobre el que dudan” (Coran 19, 33).
Recuerdan los representantes de la Comunidad Islámica de
Ceuta que “Jesús es ‘Al Ruh al Qudus’, el espíritu de
santidad... él es quien nos une a cristianos y musulmanes”.
Los líderes musulmanes de Ceuta en el mensaje más racional,
generoso y completo jamás hecho público, y en una
excepecional lección de serenidad, valentía y deseos de
convivencia en paz afirman que “no podemos permitir bajo
ningún concepto que las manipulaciones políticas utilicen la
religión, cualquier religión, como pretexto para el odio y
el enfrentamiento entre los pueblos. Hoy más que nunca se
impone conservar la calma y la serenidad y emular a nuestros
profetas. Hoy más que nunca, cristianos, musulmanes y judios,
no somos sino parte de un mismo todo legado por el Profeta
Abraham. Hoy más que nunca debemos luchar por la convivencia
que siempre ha carcterizado a esta ciudad “, amen.
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OPINIÓN / EDITORIAL
