No hay dos sin tres, así se podrían resumir las tres
jornadas que se llevan disputadas en División de Honor. Las
dos victorias anteriores del Gimnasio Ceuta Goyu-Ryu no han
sido un espejismo, y se confirmó ayer cuando los de Damián
Torres se impusieron a uno de los gallitos del grupo que
anda con los nervios a flor de piel, puesto que en tres
partidos tan sólo han sumado un punto.
El Goyu-Ryu no se vio sorprendido por un Sevilla que presume
de tener una de las mejores canteras del país, y se centró
en bascular y achicar los espacios no dejando pensar a su
rival, esperando sus ocasiones.
Los primeros minutos fueron de dominio sevillano, pero sin
crear serio peligro y un inspirado Jorge, con la suerte de
cara, fue el encargado de abrir el marcador. De todas las
pociones posibles para lanzar una falta, el delantero
gimnasta eligió lanzar al palo corto, viendo el trabajo que
en la barrera realizó su compañero Salcedo, que dejó un
hueco y descolocó la línea defensiva sevillista dejando
vendido al portero Jaime. El lanzamiento de Jorge fue pegado
a la cepa del poste, sin dar una solo oportunidad al
cancerbero del Sevilla, inaugurando así el marcador.
El Sevilla no reaccionó con este tanto, y los nervios
hicieron mella en los de Ramón Tejada y doce minutos más
tarde, Arias Madrid señalaba el punto de penalti en el área
sevillista, por una falta cometida sobre Jorge. Luis volvía
a encontrarse con un portero delante para lanzar una pena
máxima, como ya sucediera en el primer partido de Liga, y
repitiendo la situación no erró y puso el dos a cero en el
marcador.
El dibujo del partido no cambió, el Goyu-Ryu continuó con el
mismo planteamiento, y el Sevilla no conseguía acercarse a
la meta defendida por Samu con peligro. Así se llegó al
final de los primeros 45 minutos.
Tras el descanso, saltaron al artificial del federativo José
Benoliel los mismo protagonistas. La situación no mejoraba
para el Sevilla y Ramón Tejada dio entrada a tres de los
mejores hombres de la categoría Javi Martínez, Cruz y
Espinar que inexplicablemente se habían caído del once
titular y dos minutos después llegó el tanto sevillista. De
penalti, en una decisión arbitral muy protestada por el
respetable que se dio cita en el Benoliel, y restaban 28
minutos para la finalización del encuentro.
El Sevilla, con este resultado, creyó en sus posibilidades y
se creció pero efectivo Samu realizó un par de
intervenciones que evitaron la igualada, con lo que los tres
puntos conseguidos dejan al Goyu-Ryu líder.
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