Transcurridas sólo tres jornadas de Liga, el delantero Manu
Barreiro se alza como uno de los principales exponentes de
la escuadra albirroja, que mañana sábado visitará el
Martínez Pirri para medirse al Atlético de Ceuta a partir de
las 19:00 horas. El ariete del Algeciras, que recaló en la
entidad gaditana por petición expresa del técnico Manolo
Núñez, ha firmado un total de tres tantos en tres
encuentros, dos de ellos el pasado domingo en el Nuevo
Mirador ante el Cádiz ‘B’ que posibilitaron la victoria de
los suyos frente al filial amarillo.
El delantero, nacido en Santiago de Compostela hace veinte
años, se formó en las categorías inferiores del Madrid, para
pasar posteriormente a la disciplina del Valencia ‘B’. A
pesar de su altura -192 centímetros-, Barreiro ha demostrado
en este inicio de temporada una habilidad inusual para su
corpulencia. La campaña pasada militó en el Lalín (grupo I
de Tercera División). Al Algeciras de Manolín Núñez ha
llegado con la carta de libertad, siendo otro delantero
referente del juego albirrojo como en su momento sucedió con
Andrés Armada, que acabó recalando en el conjunto amarillo,
y con Juan Pablo, futbolista que estuvo en la agenda cadista
aunque al final no se culminó su fichaje. Antonio Calderón,
entrenador del Cádiz ‘B’, se ha quedado bastante
impresionado con las cualidades del ariete gallego. No en
vano fue el verdugo de su equipo el pasado domingo en el
Nuevo Mirador, cuando Manu resolvió con enorme acierto dos
acciones en el área del filial amarillo ganando a torres
como Cristhian y Chico I.
El desparpajo y la valentía que ha demostrado le hacen ser
un jugador que tiene algo más que buenas cualidades para
jugar de espalda a la portería.
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