El Atlético de Ceuta encajó ayer un nuevo revés a domicilio,
en esta ocasión en terreno cordobesista, y con el sinsabor
de haber logrado adelantarse en el marcador gracias a un
tempranero gol de Tafo que permitió soñar a los ceutíes con
la primera victoria hasta poco antes de alcanzar el
descanso.
El conjunto rojiblanco respondió pronto al peligroso disparo
efectuado en el primer minuto de partido por el local Chapi
que acabaría por estrellarse en el larguero de Ezequiel.
Superados sus problemas de colocación, Anuar se sacó de la
chistera un disparo desde veinte metros que Fernando desvió
con la vista.
Aún no repuestos del susto, el equipo norteafricano iba a
colocarse por delante en el marcador. Tafo se encargaría de
llevar a la red una jugada ensayada de saque de córner en el
minuto diez. El gol en contra enrabietó al filial, que se
volcó de inmediato sobre la puerta contraria. Al cuarto de
hora, en un saque de esquina, Ezequiel hizo una de las
paradas de su vida en una gran volea de Chapi. El meta de la
escuadra caballa hubo de multiplicarse para, dos minutos
después, desviar con la izquierda un tiro de Rubén.
Con el paso de los minutos, el Córdoba ‘B’ perdió su
momentánea claridad de ideas y los pupilos de Nayim se
envalentonaron. Ismael estuvo a punto de castigar una
pérdida de balón en el centro del campo cordobesista, pero
su disparo, asistido por Víctor, se fue desviado. A los 37
minutos, Tafo volvió a probar a Fernando, que envió a córner
con algunos problemas.
Cuando el choque parecía embarullarse y el reloj se
encaminaba inexorable al minuto 45, el equipo filial del
Córdoba cambió totalmente el guión del mismo. A los 43
minutos, tras otra acción de estrategia, una dejada con el
pecho de Pino la aprovechó Rubén para batir a Ezequiel. Su
disparo de zurda tocó en un defensa antes de llegar a la
red. Sin solución de continuidad y cuando Pérez Arjona
prolongaba el partido por las pérdidas de tiempo, Chapi se
llevó un balón por fuerza ante Jaime, que interrumpió su
carrera al borde del área. Tras el barullo posterior, en el
que hasta el jugador cordobesista vio la tarjeta, el
colegiado retrasó inexplicablemente el lugar de lanzamiento
casi diez metros, algo que no fue un problema para Antonio
Pino. El canterano ejecutó con maestría la falta para borrar
las telarañas de la meta de la Ciudad Deportiva.
La historia de la segunda parte fue la de una sentencia que
no llegaba y un sufrimiento local más por la estrechez del
marcador que por el peligro visitante. Adri probó a Ezequiel
a los siete minutos. Un libre directo de Tafo que Fernando
mandó a la esquina fue la mejor ocasión de los ceutíes en
esta segunda parte.
Con el tiempo cumplido y el Atlético con las líneas muy
adelantadas, Ezequiel abortó en primera instancia un
contragolpe cordobesista que sin embargo Cordero supo
aprovechar para provocar la expulsión del meta, debido a una
inadmisible entrada por detrás que le costó la roja directa.
Con un tiro simplemente colocado, Fede se resarció de todo
lo anterior con otro tanto de libre directo que Dani Ugarte
no fue capaz de evitar.
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