Son tantos los locales hosteleros en nuestra ciudad que
sería difícil conocerlos todos.
Cada bar, restaurante o cafetería, se encuentra dirigido por
familias o empresarios que dedican su vida entera para darle
placer a nuestros paladares.
Gente que emplea todo su tiempo en preparar platos
exquisitos, sin dejar de ponerle ganas a su trabajo y
haciéndolos con todo el amor del mundo. Eso es algo que se
nota con facilidad, en según que locales.
Uno de estos lugares, es sin duda el Bar “El Velero”. Una
gran familia de trabajadores que ponen cada día todo el
entusiasmo posible para lograr una comida de calidad y
mantener satisfecho a su público. Cosa que, hoy en día, han
logrado.
Son conocidos por su amplísima variedad en carnes y
pescados, además de su excelente trato personalizado a sus
clientes y amigos. Francisco Fernández López y Gemma Eguía
Olano, propietarios del Bar “El Velero”, son dos empresarios
entregados, que nos dedicaron un rato de su jornada para
atendernos y respondernos a todas nuestras dudas.
Mantenerse en el mundo de la hostelería no es algo fácil,
¿cómo lo habéis conseguido?
- Nosotros llevamos ya en este negocio desde hace ocho años,
siempre en este local. Supongo que la gente sigue viniendo
con nosotros por el trato personal que ofrecemos, como si de
una gran familia se tratase, y por nuestros variados platos.
¿Cómo es la clientela que recibís en vuestro bar?
- Aquí recibimos a todo tipo de personas, cualquiera que
quiera venir a probar nuestra cocina. De hecho tenemos una
gama muy amplia de público, digamos desde los trabajadores,
hasta la gente de la zona, pasando por nuestra clientela
fija que siempre acude. Aquí en Ceuta, no hay distancias, y
a la gente no le importa desplazarse aunque vivan en otras
zonas de la ciudad.
¿Cuántas personas forman la plantilla del bar “El
Velero”?
- Somos siete personas. Cuatro en cocina, y tres personas en
barra, terraza y salón.
En relación al resto de bares de nuestra ciudad, ¿cómo se
mueven los precios en vuestro bar?
- La verdad es que no hay mucha diferencia. Todos estamos
más o menos moviéndonos con los mismos precios. No se puede
abusar del cliente. En líneas generales, tenemos una buena
relación calidad-precio.
¿Notáis mucho la diferencia de afluencia de público de
verano a invierno?
- Sí, el público de verano es totalmente diferente al
público de invierno. En verano se pierde un poco más el
contacto con la gente de Ceuta, sobre todo porque la mayoría
se marcha de vacaciones. Entonces tratamos más un poco la
gente que viene de fuera, atraídos quizá por nuestra terraza
o nuestro pescado fresco. En invierno siempre suele ser
nuestra gente de siempre la que viene. Aunque siempre se
compensa. La gente que se marcha de vacaciones en verano, se
compensa con la gente que viene a pasar sus vacaciones aquí.
Así que no notamos mucho la pérdida.
¿Cuál diríais que es etapa más fuerte para vosotros?
- El verano sin duda, es mucho más fuerte. Se trabaja mucho
más, sobre todo en la noche, gracias a la terraza. En
invierno está la cosa un poco más flojita.
¿Cuáles serían vuestras propuestas para llamar la
atención y atraer al usuario?
- Aquí tenemos una gran variedad en pescados y carnes.
Tenemos una brocheta de rape, que la gente siempre viene
aquí a comerla, o también la cazuela velero. Nosotros
intentamos darles mucho cariño a nuestros clientes, nos
volcamos con ellos. Porque además ellos son los primeros que
desde siempre se han encargado de demostrarnos su cariño y
su fidelidad. En las grandes ciudades, quizá la gente está
acostumbrada a ir a comer a un lugar de paso, y luego no
volver. Pero en Ceuta, la gente siempre vuelve donde come
bien, recibe un buen trato, y sale contento. Y eso es lo que
nosotros intentamos que ocurra siempre. Por eso a todo el
que no haya venido y no haya probado nuestros platos, lo
invitamos a venir, porque los esperamos con los brazos
abiertos.
¿Cuáles son las especialidades de la casa?
- Brocheta de rape, cazuela velero, cocochas al ajillo…
Tenemos una gran variedad en pescados, y también en carnes
como puede ser la pata de cordero. Hay un amplio surtido en
marisco. Aunque lo que más salida tenga sea el pescado.
¿Trabajáis el tapeo?
- Sí, desde hace mucho tiempo trabajamos en la barra a la
hora del tapeo. Yo personalmente me encargo de preparar las
tapas y los pinchos vascos. Todos los fines de semana
tenemos una gran variedad. Realizar esos pinchos es un
trabajo duro, que te quita mucho tiempo. Pero como a mi me
encanta hacerlos, no me preocupa. Otra cosa sería si tuviera
que pagar a alguien más para que los hiciera.
¿Contáis con menús diarios?
- Sí, tenemos un menú diario de cuatro platos el primero y
otros cuatro el segundo, para elegir lo que más les guste o
prefieran ese día, además del pan, bebida y postre. Todo
totalmente casero. Porque a la gente le gusta comer fuera de
casa para que se lo sirvan, pero saben apreciar el sabor
casero de la comida.
Con la apertura de nuevos bares y restaurantes por esta
zona, ¿habéis notado un descenso de la clientela?
- La verdad es que no. Yo creo que hay clientela para todos.
La gente siempre suele ir a probar lo nuevo, por esto de la
novedad. Pero si probaron lo que realmente les gustó en su
bar habitual, siempre acaban volviendo a casa. Por suerte
para nosotros.
Para finalizar, ¿Os gustaría añadir algo más?
- Bueno, pues que estoy muy agradecido a todos mis clientes
y amigos, que vienen asiduamente al bar. Y además invitar a
todo el mundo que no haya venido hasta el momento, para que
se acerquen y prueben nuestros platos. Seguro que se
marcharán contentos. De todas formas queremos avisar, que
ahora el día tres de septiembre nos marchamos para darle
vacaciones al personal y a nuestra clientela, y volveremos
el día cuatro de octubre.
Recuerde, en el bar “El Velero” les están esperando para
ofrecerle la mayor y mejor variedad es pescado fresco del
día, mariscos y carnes. Si realmente buscan el mejor trato
personalizado y la mejor relación calidad – precio, allí
podrán encontrarla. En el bar “El Velero” les esperan con
los brazos abiertos.
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