Cuando jugábamos a la Oca apenas podíamos imaginar que
lanzar los dados sobre un tablero lleno de casillas podría
ser un símil representativo del azar que nos conduce por el
viaje de la vida. Bancarrotas, éxitos, lágrimas y vuelta a
empezar. La Oca, es sólo el final. Con este simpático tema,
la sede de Caja Madrid invita a los ceutíes a una exposición
de antiguos tableros de época, de diferentes países y
dibujos, que repasan el trayecto de un divertimento que,
aunque tiene más de tres siglos, sigue estando en casi cada
hogar.
La exposición, que se inaugura esta noche y permanecerá
abierta hasta el 30 de octubre, está instalada en el Espacio
para el Arte de la Obra Social de la entidad.
La comisaria, Violaya Sánchez, recopiló los ejemplares de la
Fundación vallisoletana Joaquín Díaz, encargada de recuperar
obras con la finalidad de su análisis etnográfico.
De martes a sábado y entre las 18:00 y las 21:00 horas y los
domingos y festivos de 11:00 a 14:00 horas, adultos y niños
podrán visitar una muestra explicativa acerca del
significado de un juego que no todos alcanzamos a
comprender.
“La decisión de que sean sesenta y tres las casillas no es
arbitraria. Las teorías hipocráticas dividían la existencia
del ser humano en nueve períodos de siete años cada uno
(9x7=63)”, explicó la coordinadora de la exposición.
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