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El nuevo Ceuta de Carlos Orúe ha arrancado con dos igualadas
a cero ante el CD Baza y la UD Mérida que han dejado a los
caballas en la decimotercera posición empatados con el
Granada, la UD Marbella y el equipo bastetano. Pero por
encima de la clasificación, a la que no se le puede conceder
excesiva importancia a esta altura de la competición, el
Ceuta ha sido un equipo con luces y sombras en el inicio de
la temporada.
En el lado positivo los blanquinegros se han vaciado sobre
el terreno de juego intentando rasear el balón y hacer daño
con la movilidad de Sergio y David Narváez, Manolo De Gomar....
Pese a que los rivales, -sobre todo el Mérida en el Murube
con penalti fallado incluido-, han generado algunas
oportunidades de gol, el equipo ceutí dejó la portería a
cero y este dato en Segunda ‘B’ es sinónimo de éxito. Novoa
atraviesa un buen momento de forma y sus paradas influyeron
decisivamente en el cero en el casillero de la AD Ceuta.
En la parte negativa el cuadro de Orúe se quedó sin marcar y
lo que es peor, a excepción de los últimos veinte minutos en
Baza cuando el conjunto de Óscar Cano jugaba con nueve
futbolistas por la doble expulsión de Neftalí y Luque, tuvo
poca llegada y menos remate. Diego Herrera, el único
delantero puro de la plantilla, apenas dispuso de una
ocasión en el Constantino Navarro para batir a Félix Campo.
Ante el Mérida corrió, peleó, se fajó con la defensa rival,
pero ni chutó porque no le sirvieron balones sus compañeros
y el argentino no es un futbolista que se fabrique las
oportunidades; es un delantero oportunista, que tiene ‘punch’,
algo que le faltó a la AD Ceuta en la primera jornada para
noquear a un Baza muy mermado. La falta de pegada, de
‘instinto asesino’ resultó preocupante y los blanquinegros
regresaron con un punto que supo a muy poco. El empate
habría tenido valor si el domingo la UD Mérida hubiera
perdido en el Alfonso Murube, pero los emeritenses
estuvieron más cerca de la victoria que de la derrota.
De todos modos, esto no ha hecho sino comenzar, la AD Ceuta
tiene un margen de mejora y lo normal es que su rendimiento
‘crezca’ cuando el equipo esté más conjuntado y rodado.
Grupo reñido
El grupo cuarto es el único de la Segunda ‘B’ en el que
ningún equipo ha sido capaz de enlazar dos victorias. Así
las cosas, siete equipos encabezan la clasificación con
cuatro puntos, aunque el líder es el Cartagena, vigente
campeón, aunque sus guarismos son idénticos a los que
presenta el Alcalá de Antonio Gil. Los alcalareños pasaron
por encima del Villanovense en la jornada inaugural y el
pasado domingo igualaron a uno ante el Marbella en el
Francisco Bono gracias a un gol de López a cinco minutos del
final.
El Cartagena, tras golear al debutante Cerro Reyes, arañó un
punto valioso del Nuevo Los Cármenes. Bordi adelantó a los
granadinos, pero Marco en el 89 estableció el definitivo
1-1.
Con cuatro puntos también figuran el Águilas, el Écija, el
Linares, el Real Jaén y el Extremadura. En el partido
‘estrella’ de la segunda jornada el Linares volvió a
derrotar al Córdoba, después de eliminarlo en la Copa. Los
de Braojos, que han convertido el viejo Linarejos en un
fortín, volvieron a sacar petróleo de las jugadas a balón
parado.
En la zona de descenso se encuentran los debutantes
Villanovense, Cerro y Portuense -los gaditanos se llevaron
una ‘manita’ de la ciudad deportiva del Sevilla- y el Málaga
‘B’ que ha empezado muy mal. El equipo de Mario Husillos,
todo un recién descendido, cayó en Arroyo de la Miel ante un
Jaén más experimentado y resolutivo. La UD Melilla, que ha
regresado al grupo IV, sólo tiene un punto tras sucumbir en
‘El Rubial’.
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FÚTBOL
/ segunda ‘B’, GRUPO ‘IV’
