El Gimnasio Ceuta Goyu-Ryu arrancó el inicio de la
competición de la mejor manera posible, sumando los tres
puntos puestos en juego, además con un aditivo extra,
sobreponerse a la situación adversa de saberse con la
enfermería al completo. Eran unas circunstancias no del todo
halagüeñas para el técnico ceutí Damián Torres, que en los
instantes previos al partido mostraba su preocupación sobre
este aspecto, pero la fortuna se alió con los gimnastas y
sacaron provecho del escaso bagaje ofensivo que presentó el
conjunto malagueño, dirigido por Francisco Escobar.
Torres valoraba se la siguiente forma esta importante
victoria: “Hemos afrontado el inicio liguero con varias
dificultades, entre ellas las lesiones, y no nos habíamos
acordado de la sanción de Younnes, y la verdad que ha sido
un inicio preocupante, pero en el resultado ha sido
fundamental el empuje del equipo”.
Pero el partido tomó un rumbo inesperado al filo del
descanso, cuando Lara Rodríguez tomó la determinación de
enviar a las duchas, si bien aun no se había cumplido el
minuto 45 de juego, a dos jugadores, uno por cada bando. Por
los amarillos, el triste protagonista de la situación fue
Reda, que no es la primera ocasión que en un equipo
preparado por Damián Torres ha visto el camino de vestuarios
antes de tiempo: “Volvemos a lo mismo con este chico. Si se
pone en lo que es disputar un partido de fútbol se le puede
sacar mucho rendimiento. Es un chaval que es muy bueno, que
tiene mucho fútbol, pero que se tiene que centrar y saber
que esto es un deporte de equipo, de lo contrario, en más de
una ocasión, nos va a dar un disgusto. Esperemos que cambie
su actitud”, argumentaba Torres sin esconder el malestar que
le suponía la situación de la expulsión por roja directa de
Reda, que además conlleva el no poderle alinear en el
siguiente partido: “En el partido de Melilla es obvio que al
ser roja directa se lo va a perder pero tenemos plantilla y
aunque parezca extraño aun estamos viendo a jugadores para
que pasen a formar parte del equipo con una gran parte de la
base de chavales de aquí de Ceuta, que creo que es la clave
del éxito de este equipo”.
Qué ambos equipos se quedaran con diez jugadores sobre el
artificio del Benoliel motivo un cambio táctico por ambos
equipos, lo que tornó un partido vibrante en otro, aburrido
donde primó en centrocampismo. Torres no excusaba ese juego
romo, pero si le daba una explicación: “La doble expulsión
nos hizo cambiar a los dos equipos el planteamiento que
teníamos previsto para este partido, nos condicionó mucho.
Quizás con once, en la segunda parte, nosotros hubiésemos
continuado presionando arriba, como lo hemos hecho en el
primer tiempo. Pero la renta que teníamos de dos goles y con
un jugador menos como Reda, que es de los mejores en cuanto
a condición física se refiere, nos hizo variar un tanto el
sistema de juego. Pero creo que el resto de los jugadores lo
ha hecho bastante bien y han podido aguantar”.
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