Aunque Procesa todavía no ha decidido de forma oficial la
venta de las instalaciones de Acuicultura S.A., todo parece
indicar que finalmente se aceptará la oferta de Mejillones y
Mariscos para hacerse con los 3.600 metros cuadrados de
superficie. La oferta económica de la empresa, la más alta
de todas las presentadas y que asciende a 2.450.000 euros,
parece satisfacer a la Ciudad Autónoma y el único escollo
que se presentaba, la forma de pago, también se ha resuelto
positivamente.
Procesa pretendía que Mejillones y Mariscos garantizase las
mismas condiciones de pago que ofrecía Alice, otra de las
empresas interesadas en Acuicultura y que finalmente se echó
para atrás. La fórmula, aceptada finalmente por Mejillones y
Mariscos es a través de una hipoteca a la cual la empresa se
subroga. A cambio, la mejillonera solicita la autorización
de Medio Ambiente para implantar 145 bateas en una
superficie de 120 hectáreas.
Mejillones y Mariscos de Ceuta empleará las instalaciones de
Acuicultura para crear una planta de cocción, depuración y
envasado al vacío de mejillones. En el techo de la nave,
actualmente construido con tela asfáltica sobre cemento, se
instalarán placas solares con capacidad para generar 800.000
kilowatios de potencia al año, el equivalente para
suministrar energía a unas 150 viviendas, que será vendida e
incorporada a la red de alumbrado y que supondrá una
inversión adicional de dos millones de euros. La primera
unidad de placas, de las cuatro previstas, se instalará en
dos meses.
En cuanto a los planes inminentes de la empresa, Mejillones
y Mariscos de Ceuta pretende instalar la sexta batea junto a
las cinco ya existentes frente a las costas de Calamocarro.
Esta batea será del tipo semisumergible, al igual que las
144 restantes, y la empresa pretende analizar previamente su
comportamiento en la bahía ceutí.
En cuanto a las cinco bateas ya instaladas, la mejillonera
tiene la primera producción paralizada hasta que obtenga los
permisos de la consejería de Medio Ambiente para la recogida
de 100 toneladas de mejillón ya engordado, mediante el
nombramiento de la zona como área de producción.
Proyecto básico
Para acometer el inicio de las reformas previstas en las
instalaciones de Acuicultura, una vez se conceda de forma
oficial la venta, Mejillones y Mariscos de Ceuta debe
presentar un proyecto básico que contenga todas las
modificaciones previstas y que será presentado ante los
servicios técnicos de la Asamblea para su incorporación a
las normas de habitabilidad y edificalidad de la zona.
La idea de la empresa mejillonera es “adaptar las
potencialidades de Acuicultura para el desarrollo de un
proyecto integral que permita la cocción, depuración y
envasado al vacío de una producción de 20.000 toneladas de
mejillón al año”. Con esta finalidad, la empresa adquirirá
en octubre un nuevo barco especializado en la manipulación y
el trabajo sobre las bateas.
Impacto económico
La empresa deberá medir en su proyecto integral el impacto
económico que supondrá la inversión de 2.450.000 euros en la
compra de las instalaciones, 1.500.000 euros más de
inversión en la reforma y adaptación de estas instalaciones
para los objetivos marcados así como la adquisición de
maquinaria y los dos millones de euros adicionales previstos
para la compra de cuatro unidades de paneles fotovoltaicos
de 100 kilowatios pico para la captación y posterior venta
de energía. Es precisamente la venta de energía solar a la
red lo que financiará el desembolso correspondiente a la
empresa de Acuicultura y las propias placas, mientras que la
inversión en maquinaria y reformas se hará a través de un
‘leasing’.
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