Mustafa Mizzian aporta a la Asamblea su experiencia y
continuismo. En los doce años que lleva participando
activamente en la política de la Ciudad, su mejor arma ha
sido la coherencia, desde un punto de vista ideológico.
Considera que su trabajo es útil y lo perpetúa, innovando
más bien poco en su línea política de oposición al Gobierno.
Sus ejes diametrales son la consecución del equilibrio
social y una multiculturalidad efectiva.
El programa del PDSC va dirigido a los estratos sociales más
desfavorecidos y luchará por el reconocimiento cultural de
las minorías. Desde el punto de vista económico, Mustafa
Mizzian propone la consecución de un definitivo dinamismo en
las relaciones económicas, que venga propiciado por la
recuperación de los sectores estratégicos. Mizzian busca
igualmente una mayor implicación de las administraciones
nacionales y europeas para resolver de un modo definitivo
los problemas económicos y sociales de la ciudad.
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