Decenas de guardias civiles, acompañados por sus familiares,
participaron ayer en los actos conmemorativos de la Virgen
del Pilar, patrona del cuerpo de la Guardia Civil y cuya
festividad se celebra mañana, 12 de octubre. En un acto que
se desarrolló en los Jardines de la Hípica, las principales
autoridades civiles y militares impusieron las
condecoraciones a los miembros del cuerpo que más destacaron
durante los últimos doce meses.
Tras la imposición de las medallas, el único civil
distinguido fue el presidente de la Autoridad Portuaria,
llegó el turno de los discursos. En primer lugar, tomó la
palabra el comandante Andrés López García, jefe accidental
de la 2007 Comandancia de la Guardia Civil, que sustituye en
el cargo al teniente coronel Carlos Guitard que se encuentra
en Madrid realizando el curso de capacitación que le
permitirá ascender a general de brigada. López ofreció
algunos de los datos más destacados de la labor realizada
por el cuerpo en el último año. En estos doce meses, los
miembros de la Benemérita detuvieron a 642 personas de las
que 77 lo fueron por realizar actos para favorecer la
inmigración ilegal en la Ciudad Autónoma y, además, fueron
localizados 2.400 inmigrantes ilegales. También es mérito de
este cuerpo “la desaparición de la presión migratoria sobre
el perímetro fronterizo durante este último año”, un logro
conseguido gracias a la colaboración con los demás cuerpos y
fuerzas de seguridad del Estado: la Policía Nacional, el
Ejército, a través de la Comandancia General de Ceuta, y la
Policía Local.
En materia de narcotráfico, los agentes se incautaron de 4,5
toneladas de hachís, 16 kilos de heroína y material por
valor de más de trece millones de euros.
El comandante destacó también el alto índice de
esclarecimiento de delitos en el seno de la 2007 Comandancia
de la Guardia Civil “lo que supone más del doble de la media
nacional”.
Además de la enumeración de los éxitos logrados, aprovechó
la ocasión para demandar, una vez más, una nueva sede para
la Comandancia “porque ésta ya tiene 60 años y presenta
muchas carencias” aunque también agradeció las inversiones
estatales del último año que han permitido realizar algunas
mejoras en el inmueble por valor de un millón de euros.
Tras su intervención, el delegado del Gobierno, Jenaro
García-Arreciado, recogió el testigo y alabó la actuación
“impecable” de los agentes destinados en Ceuta y en el resto
de España ya que: “la Guardia Civil ha sido el garante de la
seguridad nacional durante los años más duros del
terrorismo”.
Destacó también el trabajo “inestimable” del SEPRONA en su
lucha por la conservación y protección de la naturaleza.
Según palabras del propio delegado, el cuerpo de la Guardia
Civil se caracteriza por su renuncia al aplauso en beneficio
de la eficacia: “garantizando así nuestra seguridad en el
futuro”.
Arreciado recordó la creciente preocupación del Estado
español por este cuerpo en el que, al final de la
legislatura, se habrán cubierto 17.500 puestos nuevos y para
el que está previsto que se oferten hasta 3.000 plazas
nuevas de promoción interna “para que haya más oficiales y
suboficiales”. Además se refirió a la precariedad laboral
que vive el cuerpo y dijo que el Gobierno socialista quiere
que “estén mejor pagados” para lo cual está previsto que se
potencie la productividad de los agentes como factor
determinante de los complementos en el salario: “queremos
que haya más guardias civiles y que estén más incentivados”,
explicó.
Por último y al igual que hiciera la pasada semana durante
los actos conmemorativos de los Santos Ángeles Custodios,
patrones de la Policía Nacional, el delegado se refirió a la
reciente creación del mando único bajo el que se aglutinan
ambos cuerpos. Dijo que con el nombramiento de Joan Mesquida
como mando único lo que el Gobierno ha buscado ha sido “una
mayor coordinación” y esto no va a provocar una unificación
de los cuerpos que “mantendrán su estructura intacta” pero
que tendrán una mayor efectividad.
Tras el discurso del delegado y momentos antes del brindis y
de la interpretación del himno de la Guardia Civil, el
presidente de la Ciudad Autónoma, Juan Vivas, dijo unas
palabras destacando la labor desarrollada por el cuerpo en
Ceuta que con su trabajo diario “garantiza la seguridad de
todos los ceutíes”.
Una vez finalizados todos los discursos, los presentes
disfrutaron de una exquisita comida en las instalaciones de
los jardines de la Hípica, lo que sirvió como colofón a la
jornada.
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