Que Juan Vivas es inteligente,
trabajador y defensor a ultranza de Ceuta nadie lo duda. Y
que viene rigiendo la Ciudad con total acierto, tampoco. La
última acción reconocida, en este caso política, el reciente
acuerdo rubricado en el Palacio de Congresos de Málaga en
unión del Presidente de Melilla Juan José Imbroda, con el
Presidente del Partido Popular de Andalucía Javier Arenas,
por el que “se desea la asistencia y atención a la
inmigración, la sanidad, la educación universitaria, el
desarrollo económico y las comunicaciones, sin olvidar la
intensificación de las actuaciones conjuntas para la defensa
común de los intereses de Andalucía, Ceuta y Melilla, tanto
ante el Gobierno de España como ante los órganos de la Unión
Europea”. Y que Javier Arenas, luchador nato, asume las
inquietudes ceutíes como propias tanto desde el Gobierno
como en el Partido Popular, en todos los puestos que ha
desempeñado y demostrado un desmedido interés por nuestra
Ciudad, tampoco hay duda.
Sentadas, someramente, las bases de quienes son los
firmantes del acuerdo, con la presencia testimonial de los
presidentes populares de Ceuta y Melilla, no tenemos por
menos, aunque se oigan voces en contrario, que felicitar a
Juan Vivas por el convenio alcanzado ya que de lo que se
trata es de aunar esfuerzos y recibir apoyos (por desgracia
Ceuta poco puede dar) estrechando, además, las relaciones
culturales por los indiscutibles lazos históricos,
económicos y familiares que nos unen y que a través de
actuaciones como éstas se trata de lograr la intensificación
de tales sentimientos, reconocidos por todas las fuerzas
políticas radicadas en Andalucía, incluido claro está el
Partido Socialista, como así se contempla en los Estatutos
de dicha Comunidad Autónoma en los que se recoge que “se
podrán establecer con las Ciudades de Ceuta y Melilla
relaciones de especial colaboración”.
Ceuta es una enferma crónica, aun cuando con un padecimiento
que más bien pudiéramos considerar causado por un desorden
nutricional (entiéndase de escasez de medios económicos y
también, muy importante para el paciente, de apoyo moral)
necesitando, en estos momentos, de un tratamiento de choque
y, a mas largo plazo, que se mantenga la medicación (ayudas
presupuestarias) para evitar un desenlace fatal. El apoyo
moral viene dado por el Partido Popular de Andalucía a
través del acuerdo firmado entre el Presidente de la Ciudad
Autónoma y Javier Arenas y el económico (al que también
habría de unir la dispensa de atenciones morales) tiene que
ser atendido por el Partido Socialista Obrero Español ahora
en el Gobierno, conocedor de nuestra particularidad insular,
de la insuficiencia de medios con que contamos, de la
presión inmigratoria, en una palabra, de la falta de
recursos para el mantenimiento del nivel de vida que se
merece cualquier español o extranjero residente en nuestro
territorio. Por todo lo cual y porque “nunca es mal año por
mucho trigo” o por aquello de que “une y vencerás”, nos
parece un gran acierto el acuerdo adoptado entre dos
políticos, Juan Vivas y Javier Arenas de seriedad probada,
que se apoya en una propuesta muy concreta: “otorgar una
mayor relevancia al establecimiento de especiales relaciones
de Ceuta y Melilla con Andalucía” poniéndose de manifiesto,
también, la voluntad del PP Andaluz de apoyar a las dos
ciudades “en su legítima aspiración de alcanzar rango de
Comunidades Autónomas, en aplicación de la Disposición
Transitoria Quinta de la Constitución”.
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