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Greenpeace ha pedido al Ministerio de Medio Ambiente que
investigue a qué se dedica el barco, de bandera panameña,
Probo Emu ya que sospecha que está generando residuos
tóxicos de manera ilegal, además de realizar negocios con
petróleo al margen de la ley. El Probo Emu opera desde hace
dos meses en el Estrecho y se encuentra atracado en el
puerto de Gibraltar en la actualidad a escasos 14 kilómetros
escasos de la Ciudad Autónoma. El buque, que también ha
atracado alguna vez en el puerto de Algeciras, reúne
características similares al Probo Koala, barco que provocó
hace un par de meses un vertido tóxico en Costa de Marfil,
que costó la vida a siete personas y envenenó a otras
85.000. Ayer mismo, varias organizaciones ecologistas
pidieron a las autoridades españolas y gibraltareñas que
investiguen las actividades del barco, propiedad de una
empresa holandesa, ya que podría suponer un enorme peligro
para las población algecireña. “Este barco realiza siempre
el mismo recorrido. Desde Gibraltar va a aguas
internacionales y de nuevo regresa al Peñón. Por lo que
tememos que se esté dedicando a realizar algún tipo de
transferencia de combustible”, señaló el presidente de
Greenpeace Juan López Uralde.
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