La artista ceutí, Beatriz Lamenca, inauguró, ayer, en el
museo de las Murallas Reales, y acompañada de la consejera
de Cultura, Mabel Deu, su más reciente trabajo fotográfico:
‘La Habana-Trinidad 2003’. Una particular percepción de la
realidad cubana bajo un manto de blanco y negro, que se
podrá visitar hasta el próximo 20 de enero, y que consigue
trasladar al espectador una nueva visión frente al habitual
colorido que inunda el carácter social y las
infraestructuras del país caribeño.
Un total de 118 obras componen la historia de un viaje que
Lamenca realizó hace tres años y del que, ahora, extrae las
conclusiones visuales.
Retratos, actividades costumbristas, perspectivas desde
automóviles... La fotógrafa ceutí revisa su imagen de la
Habana para aportar otro punto de vista.
Su última colección fotográfica ‘Un camino de luces’ (2005),
que presentó en el museo del Revellín, estaba compuesta por
más de una treintena de fotografías, también en blanco y
negro, tomadas en diferentes lugares del mundo com la ‘Playa
de Martil’ (Tetuán), ‘Paseo en góndola’ (Venecia),
‘Atardecer desde el Malecón’ (La Habana), ‘Por algo se
empieza’ (París), ‘La tarde’ (Bruselas); sin faltar
instantáneas tomadas en la Ciudad Autónoma como ‘Nuestra
Madre. Procesión Virgen de África’ ó ‘Corpus 1.994’, entre
otras.
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